Tras estos encuentros, que se celebraron por separado, Rajoy ha mandado un mensaje de que quiere pactar una nueva reforma laboral los "más velozmente posible", desde ahora y "hasta después del día de Reyes", tal y como explicado Rosell.
Hoy les toca el turno a los presidentes regionales, a quienes el futuro presidente del Gobierno trasmitirá su voluntad de cumplir los objetivos de déficit establecidos al menos para 2012 y 2013.
Precisamente, esta misma semana se han conocido los datos del déficit de las autonomías hasta el 30 de septiembre, que se cifraba en el 1,19 por ciento del PIB, una décima menos del 1,30 fijado para final de año, si bien alguna comunidad del PP, como Castilla-La Mancha o Murcia, sobrepasa con creces esa desviación (4,84 por ciento y 3,03, respectivamente).
Otras comunidades del PP, como Castilla y León, Castilla-La Mancha y Aragón, todavía no han presentado sus proyectos de presupuestos para el próximo año, en espera de unas "directrices básicas" del nuevo Gobierno, como el caso del Ejecutivo que preside Juan Vicente Herrera.
Es probable, por tanto, que los responsables autonómicos soliciten a Rajoy alguna información sobre las previsiones de ingresos para el próximo ejercicio a fin de poder cuadrar sus cuentas.