O él y yo, viene a decirle Gay a Rosell. No se puede debatir con libertad a puerta cerrada sobre aspectos tan graves de la realidad española a sabiendas de que luego un compañero de mesa, en este caso Segurado, va a ir por todas las televisiones retransmitiendo la jugada. Basta ya. Si el presidente de CEOE no corrige esta situación y sigue contando con Segurado en la ejecutiva, advierten fuentes de la patronal catalana, posiblemente Gay deje de asistir a sus reuniones. Órdago a la grande.
Un portavoz de CEOE resta relevancia a la misiva y no la relaciona tanto con la convulsión interna que la deriva independentista catalana ha provocado en Diego de León, 50, como con “la violación de una norma que siempre ha imperado en esta organización y que consiste en no desvelar las deliberaciones internas que requieren del necesario secreto”. En efecto, Segurado se ha ido de la lengua en las últimas semanas más de lo que el propio Rosell y la mayoría de los miembros del comité ejecutivo de la patronal hubieran podido imaginar, aprovechando como palanca la apuesta independentista de Artur Mas y la tímida respuesta que ha recibido, en su opinión, por parte de los empresarios.
Joaquim Gay (Fomento) le ha dicho a Rosell que no puede reflexionarse con libertad si hay un "traidor" en las filas de CEOE que luego lo cuenta todo por las televisiones
Pero lo que pone por escrito Joaquim Gay, en carta dirigida a Rosell, con copia para los vicepresidentes de CEOE, es que se debe cesar a Segurado porque está contribuyendo a alimentar el enfrentamiento interno en un momento en el que la sociedad espera de los empresarios no una imagen de división, sino una actitud a la altura de los difíciles tiempos que corren y una estructura de patronal moderna. A juicio de Fomento, sobran las figuras anacrónicas y, en opinión de sus dirigentes, Segurado es una de ellas.
Otras fuentes de la patronal interpretan la carta a Rosell como “una señal de alerta” para el propio destinatario, pues si continúa admitiendo "indisciplinas y traiciones" como las de Segurado, su puesto puede estar en el alero. En Fomento se habla a las claras de Segurado como de "un traidor", aunque también se vierten contra él expresiones más sonoras.
Rosell y Arturo Fernández (CEIM) han pactado templar gaitas hasta que se celebren las elecciones catalanas
Rosell ha hablado de esta misiva con el presidente de CEIM, Arturo Fernández, y ambos han acordado establecer un compás de espera. Ayer miércoles no era el momento de abrir la caja de los truenos en la Junta Directiva de la patronal ya que acogía como invitada a la ministra Fátima Báñez - “Fue muy valiente, conociendo el enfado de los empresarios por la renuncia del Gobierno a rebajar las cotizaciones, tiene mérito dar la cara y no esconderse ante las dificultades”- y ahora tampoco conviene agitar la tormenta en plena campaña electoral en Cataluña porque el 26 de noviembre pueden pasar dos cosas, que Artur Mas se baje de la ola o que siga instalado en ella, escenarios ante los que habrá que responder, lógicamente, con registros muy diferentes, se resume en Diego de León.
Los empresarios elogiaron a Fátima Báñez: "Es valiente y dio la cara, no se esconde ante las dificultades"
El pacto de silencio entre Rosell y Arturo Fernández para impedir que la sangre llegue al rio y esperar al desenlace de las elecciones catalanas tiene su importancia porque supone también un aviso para quienes dentro de CEOE pueden estar aprovechando la polémica independentista para debilitar el liderazgo del presidente de la patronal. Él lo desmiente, pero a Segurado se le supone cabalgando en el mismo torpedo que al andaluz Santiago Herrero, dirigido contra la silla de Rosell y propulsado por los problemas que éste encuentra para arbitrar el conflicto entre Fomento y otras federaciones como la andaluza o la madrileña.
Rosell y el propio Gay tienen que pastorear intereses enfrentados, pues los de las multinacionales, los de las empresas catalanas con fuerte implantación en el resto de España y los de los pequeñosbotiguers circulan por pistas bien diferentes.
De momento, se mantienen en público las formas, pero las calenturas circulan por correo.