Los ayuntamientos de Málaga y Marbella, ambos gobernados por el Partido Popular, no han querido confirmar que los motivos alegados por el presidente del CGPJ, Carlos Dívar, para justificar unos gastos de 13.000 euros de dinero público, sean ciertos. El portavoz del consistorio malagueño "no puede asegurar" que el alcalde se reuniera en febrero de 2011 con el presidente del Supremo: "no se puede confirmar que los encuentros se produjeran en las fechas que señala Dívar", aunque sí es cierto que había habido contactos entre el alcalde Francisco de la Torre y el presidente de los jueces, para pedirle ayuda por el atasco en los juzgados mercantiles de la ciudad.
Sin embargo, del encuentro que Dívar informa y que se produjo entre el 3 y el 7 de febrero de 2011 y por el que cargó al erario público 871 euros, en el ayuntamiento de Málaga no saben nada.
Por su parte, desde el ayuntamiento de Marbella tampoco se puede confirmar -en declaraciones al diario El País- la veracidad de los encuentros con ellos que asegura haber realizado Carlos Dívar. Su alcaldesa Ángeles Muñoz no puede precisar las fechas en las que se encontró con Dívar y tan sólo asegura que 'coincidió' con él en un acto oficial organizado por el ayuntamiento.
El teniente fiscal del TS Juan José Martín Casalllo, que archivó la denuncia contra Dívar, admite que "la aplicación de cada caso particular -en el caso de los viajes- no deja de generar alguna duda", hasta el punto de que se admitía que Dívar pudiera acudir unas horas a la imposición de una medalla a un cargo judicial de Málaga y pasara gastos por cuatro días de alojamiento y manutención en Marbella.