El Ayuntamiento de Requena, a escasos kilómetros de Utiel y situado en una de las zonas de la provincia de Valencia más afectadas por la catástrofe provocada por las inundaciones, ha registrado la mañana de este martes la insólita escena del debate de una moción de censura que ha converitdo en nuevo alcalde al socialista Mario Pérez, que toma por medio de esta treta la vara de mando gracias al apoyo de un partido local que hasta el pasado mes de agosto había apoyado a la alcaldesa del PP, Rocío Cortés, también presidenta de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias, que apenas ha permanecido un año en el cargo.
El acto político ha sido criticado por unos vecinos incrédulos por el contexto de desolación en que se produce y cuando la prioridad es recuperar la normalidad en un municipio que fue golpeado severamente por las inundaciones de la pasada semana en lo que ha supuesto la mayor castástrofe meteorológica registrada en España en las últimas décadas.
También el PP ha reaccionado con incredulidad y una enorme carga crítica al hecho de que el PSOE no haya podido retrasar su nueva vuelta a la alcaldía hasta que la situación se normalizara. Así, el portavoz del PP en las Cortes Valencianas, Juanfran Pérez, ha expresado que “mientras los vecinos limpian barro, la prioridad del PSOE es echar a la alcaldesa de un pueblo afectado por la DANA”.
Los "bulos" de Compromís
En un ambiente de cierta tensión política y enmedio de las tareas de limpieza y reconstrucción del municipio, Pérez ha habilitado como alcalde gracias a los votos de los ochos concejales socialistas y a los tres del Partido de las Aldeas, con cuyo apoyo ha gobernado hasta hoy el PP.
El PP se ha preguntado “cómo permite el PSOE que sus concejales asalten la alcaldía” de Requena, y su portavoz parlamentario ha considerado que este tipo de episodios son lo que menos necesita la ciudadanía “en estos momentos de desasosiego, intranquilidad y preocupación".
El portavoz del PP en las Cortes Valencianas ha añadido en sus críticas a los socialistas la presunta actitud de Compromís que, según Juanfran Pérez, trata de "sacar rédito político, lanzando bulos, crispando en redes sociales y utilizando la tragedia para hacer una oportunidad política".
