Ximo Puig no quiere más fracasos del PSOE valenciano en las instituciones y ha blindado a Carlos Fernández Bielsa como candidato a la presidencia de la Diputación de Valencia. Más allá de la relación tensa entre ambos dirigentes el secretario general de los socialistas valencianos quiere contribuir a que la federación valenciana tenga una plataforma institucional en la Comunidad Valenciana.
El pasado 28-M borró del mapa a los socialistas de la Generalitat, las Diputaciones de Alicante y Castellón y los principales ayuntamientos. Perder la Diputación de Valencia, como ahora mismo todo apunta, sería un fracaso colectivo del PSOE valenciano y Puig también se ha puesto manos a la obra.
Ens Uneix sigue firme
La posición de fuerza del partido liderado por Jorge Rodríguez, Ens Uneix, ha activado todas las alarmas entre los socialistas valencianos. Con una sola diputada, Natalia Enguix, Ens Uneix asegura que en el pleno de constitución, previsto para el próximo viernes, votará a su candidata. Si PSOE (12 diputados) y Compromís (3) quieren salvar un gobierno 'progresista', deberán votarla a ella.
El jefe de gabinete de Rodríguez, Ricard Gallego, apuntaba ayer en una entrevista en Plaza Radio que la posición de su formación política no va a variar, aunque reconocía que había canales de diálogo abiertos con el PSOE.
Las fuentes consultadas por Vozpópuli en el entorno del líder socialista en la Diputación de Valencia y secretario general provincial del PSOE, Carlos Fernández Bielsa, confirmaban esos contactos. Las conversaciones para desatascar el acuerdo continúan con "personas interpuestas".
Encuentro Bielsa-Rodríguez
Bielsa y Rodríguez no han hablado directamente en los últimos días pero no es descartable que con los acercamientos previos de otros negociadores puedan celebrar un encuentro antes del próximo viernes. La negativa de Rodríguez a darle al PSOE la presidencia parte más del rencor que éste le guarda a Ximo Puig por haberlo expulsado del partido cuando fue detenido en el marco de la operación Alquería.
En su comparecencia pública del pasado viernes, Jorge Rodríguez, mencionó que el PSOE valenciano no estaba unido en torno a Bielsa y que era difícil asumir que sus promesas tenían el respaldo de todo el partido.
Esta circunstancia es la que Ximo Puig ha querido abordar. En su visita a Castellón, el líder del PSOE valenciano reflexionó ayer sobre lo que está sucediendo en la Diputación de Valencia y recordó que "en primer lugar hay una mayoría progresista que han votado los ciudadanos. Por lo tanto la lógica democrática dice que haya una mayoría progresista".
El PSOE lidera esa posición por derecho democrático y Carlos Fernández Bielsa es el que debe encabezarla, desde la generosidad y la diversidad, hay un objetivo comúnXimo Puig
Para Puig está claro que "el PSOE lidera esa posición por derecho democrático y Carlos Fernández Bielsa es el que debe encabezarla, desde la generosidad y la diversidad, hay un objetivo común". Por ello, ha enfatizado que "esperemos que sea así y Bielsa cuenta con el apoyo de todo el PSPV y de la mayoría democrática".
Ese reconocimiento tácito a la figura de Bielsa supone el primer espaldarazo público de Puig a quien muchos ven en el partido como un claro aspirante a la sucesión del actual secretario general. En su análisis Puig avanzó que "se harán las aproximaciones necesarias, pero ante la amenaza de un Gobierno provincial PP-Vox lo razonable es ponerse de acuerdo y mirar hacia adelante".
Bielsa o PP-Vox
Ximo Puig, también planteó a Ens Uneix una disyuntiva: "o se va a un modelo como el de Toni Gaspar que ha sido un presidente de la Diputación para todos los ayuntamientos, sin discriminación; o se quiere volver a la Diputación de la época de Alfonso Rus que se caracterizaba por el clientelismo y la corrupción".
El otro partido del bloque de izquierdas, involucrado en estas negociaciones, es Compromís. Su portavoz en las Cortes, Joan Baldoví no ha querido 'mojarse' tanto como Puig y se ha limitado a repetir que "lo que nos indica la comisión negociadora es que seguimos negociando hasta el úlltmo momento una mayoría progresista, se han de agotar todos los días.".
Eso sí, no ha dicho abiertamente si Compromís votaría, llegado el caso, a Natalia Enguix como presidenta. "Tendría toda la legitimidad pero también la tendría Compromís. Confío en que finalmente se llegará a un acuerdo".
Bielsa, Rodríguez y Mompó se juegan mucho
En la partida de ajedrez que se está jugando en la Diputación hay mucho en juego. Carlos Fernández Bielsa se juega gran parte de su promoción interna en el PSOE valenciano en esta operación. Salir derrotado le restaría apoyos para una futura candidatura autonómica, del mismo modo que salir victorioso de una difícil negociación avalaría su paso adelante orgánico y dispondría de una plataforma institucional que le proporcionaría más relevancia.
Compromís está en tierra de nadie porque en ningún escenario se plantea que obtenga la Presidencia. Eso sí, pelea porque haya un acuerdo que permitiría tener un mayor número de asesores en función de las áreas de responsabilidad que obtuviera.
Ens Uneix también tiene en juego un número de asesores importante. La Presidencia no llevaría aparejada tantos apoyos pero si finalmente cede a que ese puesto lo ocupe Bielsa, sacará rédito de ese acuerdo y puede tener más personal de confianza que el le correspondería con solo una diputada.
En caso de permitir un gobierno del PP su base de votantes, de procedencia socialista, podría no perdonárselo en la próxima cita con las urnas en 2027.
El PP de Vicente Mompó mientras, sigue agazapado esperando que una ruptura entre el bloque de izquierdas acabe proporcionándole la presidencia con sus 13 diputados, en segunda votación, como fuerza más votada.
Mompó también se juega dejar de ser el único referente del PP valenciano que no ha logrado el objetivo de presidir una institución, algo que sí han logrado Carlos Mazón (Generalitat); Toni Pérez y Marta Barrachina (Diputación de Alicante y Castellón), María José Catalá, Luis Barcala y Begoña Carrasco (Ayuntamientos de Valencia, Alicante y Castellón).
Vox, con dos diputados, no está formando ahora parte de ninguna negociación y difícilmente tendrá un papel destacado en la gestión de la Diputación en esta legislatura por el 'cordón sanitario' al que le ha sometido Ens Uneix y el resto de fuerzas de izquierda.