La llegada de las vacunas arroja cierta luz sobre un futuro hasta ahora teñido de negro por la pandemia de covid. Sin embargo, quizá el fin de la partida no esté tan cerca como algunos pensábamos. Así lo explica Alfredo Corell, galardonado como mejor profesor en 2018, un inmunólogo que se ha hecho más y más conocido gracias a sus intervenciones televisivas, donde explica de forma didáctica la covid, las vacunas y cómo se comportan nuestras defensas.
Corell no aprueba que estemos llegando a los últimos coletazos de la pandemia de coronavirus, tal y como explica a Vozpópuli: "Hablar de inmunidad de rebaño cuando tengamos un 70 por ciento de población vacunada es un mito. Con estas vacunas necesitamos que se vacune al menos el 90 por ciento de la población para hablar de inmunidad de rebaño".
El inmunólogo explica que hay dos razones de peso para pensar así. Por un lado, que las vacunas aprobadas no han demostrado su capacidad para evitar la trasmisión del virus, por lo que una persona vacunada podría seguir contagiando a otros, aunque ella esté protegida. A esto hay que sumar que su eficacia de inmunización no es del 100 por 100.
"El concepto de inmunidad de rebaño, tal como lo entendemos con otras vacunas, patina en la covid. El porcentaje de personas que se necesitan vacunar para llegar a esa inmunidad varía con respecto a la eficacia de la vacuna. La de AstraZeneca, por ejemplo, está entre el 60-80. El asesor médico jefe del Presidente de los Estados Unidos, Anthony Fauci, ya ha señalado que se necesita al menos un 80 por ciento de vacunados para tener esa inmunidad de rebaño".
El riesgo de otra pandemia
Otro de los aspectos que preocupan a Corell es el ritmo de mutación del coronavirus. "Las mutaciones llevan sucediendo desde el minuto cero. Cada copia que hace el virus en un cuerpo genera un fallo. Tiene una maquinaria de copia muy mala y se producen fallos. Estos fallos les dan ventaja evolutiva. Uno por casualidad es más fuerte que el predecesor y es cuando la variante se perpetúa".
Se han popularizado tres variantes, la británica, la sudafricana y la brasileña, pero pueden haber existido muchísimas más. "Hay 489.340 secuenciaciones en el banco de datos internacional GISAID, es decir, no se secuencian todos los casos. Es más, hasta febrero, el mismo portal solo recogía 110.00 secuenciaciones a nivel mundial".
Si una variante es resistente habría que reiniciar las campañas de vacunación"Alfredo Corell, inmunólogo y experto
Corell no descarta que "cuando haya más población inmunizada se produzcan más mutaciones que permitan al virus saltarse esa defensa. Al presionar al virus con la vacuna muta más deprisa". Es por ello que la celeridad en la vacunación es primordial, ya que "si alguna variante fuera resistente estaríamos iniciando otra epidemia. Si eso ocurre, habrá que mantener las normas de comportamiento social. -Higiene, distancia, ventilación y lavado de manos- y habría rediseñar las vacunas y empezar nuevas campañas de vacunación".
Este especialista afirma que "para la variante británica, todas las vacunas que tenemos funcionan bien. Para la sudafricana, sin embargo, baja la eficacia. La de Brasil va a ser más o menos como la sudafricana. Estos cambios genéticos permiten que los anticuerpos no la reconozcan tan bien. Las vacunas pueden reconocerlas pero peor".
Cierre de fronteras
En cuanto a la compra de vacunas en Rusia o China, Corell no se muestra en contra siempre y cuando aporten datos de los ensayos: "No hay información científica publicada de la vacuna china. Esa vacuna actúa frente a todo el virus (inactivado) pero está mostrando una efectividad muy diferente. Del 91 por ciento en Turquía al 50 por ciento en Brasil".
En Taiwán no han hecho confinamiento gracias a que cerraron fronteras"Alfredo Corell, inmunólogo
El inmunólogo desconfía de la posibilidad de llegar a un 70 por ciento de vacunados en verano como prevé el Gobierno: "El ritmo a que se va a conseguir ha dependido del número de dosis y de la logística. Es complicada, sobre todo con Pfizer, reconstituidas tiene un plazo corto de utilización. Me parece muy improbable llegar al 70 por ciento de personas vacunadas en verano".
Asimismo, muestra su preocupación por "el concepto egoísta de tener al 70 por ciento vacunado en España. Tiene que llegarse a ese porcentaje en el mundo para que haya inmunidad". Cuando España alcance un número importante de vacunados, Corell aboga por cerrar fronteras, como han hecho países como Taiwán. "Ha sido el país que mejor ha gestionado la pandemia. No han hecho confinamiento gracias a que cerraron las fronteras. Cuando hayamos vacunado a la población hay que establecer 15 días de cuarentena y vigilancia para los que vengan de fuera", sentencia.