Cuarenta y dos horas entre el cierre de la votación y la difusión de los resultados. Este tiempo, excesivo para algunos, y necesario, para otros, ha elevado la tensión entre las dos principales candidaturas a la dirección de Podemos Comunidad de Madrid: Adelante Podemos, capitaneada por la concejal Rita Maeste y la diputada Tania Sánchez, y Juntas Podemos, liderada por el senador Ramón Espinar, al que ha estallado el caso de la polémica venta de su piso en plena campaña de estas primarias. Las dos listas se vigilan al milímetro ante posibles alternaciones en el cómputo de los votos, ya que intervendrán en el mismo afines a una u otra opción.
Las votaciones tanto en las delegaciones autonómicas de Madrid, Andalucía, Extremadura, La Rioja, Castilla y León, Navarra y Aragón como en las municipales de Alicante, Pamplona, San Sebastián, Santander, Málaga, Palma de Mallorca, León, Burgos, Salamanca, Hospitalet, Lleida y Tarragona, se cerraron a las doce de la noche del miércoles. Sin embargo, hasta esta tarde no se conocerán los resultados. De momento, el sector errejonista derrochaba optimismo este jueves durante la espera.
Desde la dirección de Podemos se ha justificado la tardanza con que habrá un doble proceso de verificación. En el primero, iniciado ayer, participan el equipo de informática de Podemos, la secretaría de Organización que dirige Pablo Echenique y la Comisión de Garantías Democráticas, que prepararán los informes antifraude de cada votación (datos de participación detallados, verificación del número de votantes, direcciones IP, mesas de votaciones, teléfonos consecutivos, email sospechosos, etc). La segunda fase de inspección tendrá lugar este mismo viernes en que los mismos actores realizarán el control junto con los auditores (de cada territorio). A continuación, la empresa de software Agora Voting y la plataforma Open Kratio se encargarán de hacer el recuento informático.
Hay participantes en este proceso de control que han centrado las miradas por su cercanía a una candidatura determinada
Sin embargo, según ha podido saber Vozpópuli de fuentes internas, hay participantes en este proceso de control que han centrado las miradas, fundamentalmente por su cercanía a una candidatura determinada. Por ejemplo, Erick Labuske, que ha sido el responsable de procesos telemáticos en Podemos y tiene cierta ascendencia sobre componentes del equipo informático del partido, ha pedido el voto en las redes sociales para la lista de Rita Maestre y Tania Sánchez, es decir, la opción vinculada al número dos de la formación morada y secretaria Político, Íñigo Errejón. Labuske es miembro de la Ejecutiva regional de Madrid que será renovada en estas primarias.
Otro nombre que ha generado debate, apuntan distintas fuentes consultadas, es el de la presidenta de la Comisión de Garantías Democráticas, Gloria Elizo. Se le considera próxima a los pablistas (por el núcleo duro del líder del partido, Pablo Iglesias), que han apostado por el senador Espinar, junto a los anticapitalistas. Elizo es la máxima autoridad del aparato fiscalizador de la organización morada. Siempre que ha habido denuncias de irregularidades en procesos de este tipo se han dirigido al órgano que gestiona esta abogada.
¿Confianza en el sistema?
El sistema telemático de elección interna en Podemos ha estado en entredicho en más de una ocasión. Cabe recordar la dimisión en febrero de 2015 de Cristopher David Caamana Gómez, ingeniero informático e impulsor del círculo de I+D+i. Caamana Gómez explicó que las razones de su marcha se debían a los graves errores detectados en las herramientas de registro y votación utilizadas por Podemos. Según declaró, el censo que maneja la formación "no es fiable en absoluto", representa una "aberración técnica" y supone "un esperpento informático".
En el caso de la Comunidad de Madrid, han votado finalmente 27.223 inscritos, lo que supone un 36,65% del censo total llamado a voto (76.354) y un 54,52% sobre los 49.934 inscritos activos, es decir, aquellos que han utilizado al menos una vez el portal de Participación en el último año, según informó la secretaría de Organización. Estas primarias madrileñas marcarán un antes y un después en el futuro rumbo de la formación morada, ya que se enfrentan el modelo aperturista, moderado y transversal de los errejonistas al proyecto rupturista y más radical de pablistas y anticapitalistas.
