Un centenar de pymes catalanas se han unido para hacer frente al independentismo del Gobierno de Artur Mas y "dar voz a todos los empresarios que tienen miedo", ya que a su juicio, las grandes empresas "pueden mostrarse algo temerosas". El vicepresidente primero de la asociación Empresaris de Catalunya, José Bou, ha explicado en una entrevista en la cadena Cope que los grandes empresarios "no se atreven a salir" porque supondría "estar a mal con el poder" y sus empresas, "que son fabulosas pero también gigantes con pies de barro", tienen "contratos con la administración" y "subvenciones".
El Ejecutivo de Mas "gobierna para un tercio. El resto, estamos a la intemperie", denuncian
Bou ha asegurado que entiende su postura y cree que, si él estuviese en la misma situación, tal vez "sería uno más de los que están a la cola", pero espera que "quizás" se unan a la nueva asociación cuando vean cómo salen a dar la cara aunque se "la partan". Según Bou, el objetivo de Empresaris de Catalunya es "alertar de las consecuencias negativas económicas, evidentemente políticas, e incluso morales y de convivencia" que podría tener la independencia de Cataluña y ha añadido que van a "luchar contra el Govern", que, a su juicio, "gobierna para un tercio". "El resto, estamos a la intemperie", ha denunciado.
Su intención es luchar contra el presidente catalán y " el poder democráticamente elegido", porque han "abandonado" los "principios de legalidad y neutralidad" algo que, a su juicio, "es muy grave".
Mayoría silenciosa
La nueva asociación, formada por directivos y profesionales liberales de sectores muy diversos, nace con el objetivo de exponer su visión sobre la actualidad económica catalana y española y de alertar de las consecuencias negativas que la independencia de Cataluña tendría para el conjunto de la sociedad.
El empresario Mariano Ganduxer, presidente del Grupo Bonanova, lidera la asociación, que asegura ser "independiente de cualquier órgano de poder, ya sea político o empresarial", y que busca representar a una amplia diversidad de empresarios "de todos los tamaños y sectores".
La asociación cuenta con el apoyo de grandes empresarios, aunque éstos, por temor a involucrarse en el debate político, prefieren "no ser visibles" y mantenerse por ahora al margen de la organización. "Muchos empresarios están callados y no dicen nada, pero vamos a ser su voz", afirma Bou, propietario de una panificadora y una promotora y que está dispuesto a "dar la cara" y a posicionarse en contra de la deriva soberanista del presidente de la Generalitat, Artur Mas. "Los catalanes que no somos independentistas somos una mayoría, pero silenciosa", subraya Bou.
A la nueva organización pertenecen también empresarios como Ramón Romagosa, Ferrán Brunet, Enrique Saegner, Jorge Buxadé, María Moya o Sergio Martínez Campos.
Manifiesto
A través de actos en todo el territorio catalán, Empresaris de Catalunya quiere dar a conocer su visión sobre el mercado para que las empresas y la ciudadanía en general tengan "una información veraz, contrastada y útil" de los riesgos que conlleva el proceso independentista. La asociación se presentará oficialmente en sociedad el próximo 11 de diciembre, en un acto en el que hará público un manifiesto en defensa del papel de Cataluña y los catalanes en la economía española y de una España fuerte "dentro del proceso de desarrollo e integración de la Unión Europea".