Una estatua dedicada a los Tercios españoles en un lugar emblemático de Madrid. Esa es la iniciativa que unen al ex Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), el general Fernando Alejandre, al pintor Augusto Ferrer-Dalmau y al escultor Salvador Amaya. La irrupción de la pandemia lastró las gestiones con el Ayuntamiento de la capital, iniciadas en tiempos de Manuela Carmena, pero ahora relanzan el proyecto dispuestos a que el proyecto cobre forma.
El planteamiento tiene un punto de partida. En el año 2017 se cumplieron 450 años del Camino Español, la ruta abierta bajo el reino de Felipe II que conectaba Milán con Flandes para trasladar recursos a los actuales Países Bajos. Las dificultades que se encontraban por rutas marítimas, marcadas por las tensiones internacionales, obligaron a abrir el camino terrestre, en lo que se considera uno de los mayores despliegues logísticos en la historia militar. “Los soldados ganan las batallas y la logística gana las guerras”, es un dicho habitual entre el personal de las Fuerzas Armadas.
El teniente general retirado César Muro detalla en el blog del general Dávila cómo le llamó el JEMAD Alejandre a su despacho en el año 2017 para impulsar la instalación de un monumento a los Tercios en conmemoración del 450 aniversario del Camino Español.
Rápidamente se pusieron en contacto con el pintor Augusto Ferrer-Dalmau, conocido con el sobrenombre de 'el pintor de batallas', y con el escultor Salvador Amaya. Y entre las ideas y sugerencias de unos, y las habilidades de otros, diseñaron una estatua dedicada a los Tercios.
La estatua en Madrid
Arrancaron las negociaciones con el Ayuntamiento de Madrid, dirigido por Manuela Carmena. Su intención era colocar el monumento en el Paseo de la Castellana, en el jardín que se ubica entre el Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional (CESEDEN) y el Estado Mayor de la Defensa (EMAD), que compaginaba la visibilidad propuesta y el cobijo de las cercanas instituciones militares.
Pero el devenir de los acontecimientos no les fue favorable. Primero llegaron otras iniciativas similares y que, por aniversarios y por el impulso que ya tenían, eran irrefrenables. Fueron los monumentos a los héroes de Baler y al centenario de la Legión, en los que también participaron el pintor Ferrer-Dalmau y el escultor Salvador Amaya.
Ambas iniciativas -dedicadas a los héroes de Baler o al centenario de la Legión- ya han encontrado el camino para convertirse en realidad. La primera se topó con serios problemas de localización, toda vez que sus impulsores pretendían instalarlo en la avenida de Islas Filipinas, mientras que el ayuntamiento de Manuela Carmena alegó contratiempos estructurales por el peso del monumento sobre los túneles del Metro. Finalmente, y con José Luis Martínez-Almeida al frente del consistorio, se inauguró la estatua en el citado emplazamiento de Chamberí.
Después llegó la marcha del general Alejandre como Jefe del Estado Mayor de la Defensa, la pandemia del coronavirus, el cambio de color en el Ayuntamiento de Madrid. Pero los padrinos de la iniciativa dedicada a los Tercios retoman ahora el plan a través de la recién creada Fundación Arte e Historia Ferrer-Dalmau, apoyándose en otros grupos como la Asociación 31 Enero Tercios, la Asociación Amigos del Camino Español y la Fundación Tercios de Extranjeros.
El ex JEMAD ha iniciado contactos con grupos empresariales en busca de patrocinadores, pero al mismo tiempo se ha abierto una colecta popular para financiar las obras relacionadas con la creación del monumento a los Tercios. Es un sistema similar al que sirvió para que los proyectos de los héroes de Baler y del centenario de la Legión cobrasen forma. El objetivo de los propulsores, haciendo un guiño al dicho popular inspirado en la historia de los Tercios en Flandes, es “poner una pica en la Castellana”.