El nombre del general retirado Fulgencio Coll está ligado a algunos de los episodios más significativos de la historia reciente de las Fuerzas Armadas. No en vano llegó a desempeñarse como Jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra y, antes, lideró la creación de la Unidad Militar de Emergencias (UME), siendo su primer jefe y diseñando tanto su estructura interna como sus procedimientos, claves en intervenciones como las que estos días se desarrollan en Valencia ante las consecuencias de la DANA.
Tras una vida vestido de uniforme, en diciembre de 2018 dio el salto a la política de la mano de Vox en el Ayuntamiento de Palma de Mallorca. En base a su trayectoria militar, valora para Vozpópuli la respuesta coordinada entre Moncloa y Comunidad Valenciana ante las consecuencias de las riadas, que ya se ha cobrado la vida de 217 personas de acuerdo a las últimas cifras oficiales.
El general Coll apunta directamente el Ministerio del Interior, dirigido por Fernando Grande-Marlaska, y a Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, por “denegación de auxilio”. También lamenta que Carlos Mazón, presidente autonómico, no pidiera desde el primer momento que se escalara hasta el nivel 3 de emergencia, que permitiría una coordinación centralizada ante la tragedia en manos de la UME, en lugar de transferir las capacidades a la autonomía.
Pregunta. Usted fue el primer jefe de la UME.
Respuesta. Se me nombró a partir de enero de 2006. Empecé el proceso de análisis y de estudiar qué modelo de unidad necesitábamos, qué podíamos hacer, y me rodeé de un extraordinario equipo, de un extraordinario Jefe de Estado Mayor y 13 militares especialistas de diferentes áreas. Y en el Ministerio de Defensa quedamos bajo el ala de la Secretaría de Estado, y con un ministro de gran peso político como lo era José Bono, y del Secretario de Estado de Defensa, que era Francisco Pardo Piqueras [actual director general de la Policía Nacional].
P. ¿Fue complicado ese desarrollo?
R. Quizá sea uno de los pocos casos de la Historia de España donde se desarrolla un proyecto nacional con presupuesto inicial necesario y con apoyo total y absoluto al que iba a desarrollar el proyecto. Me dejaron libremente elegir equipo. En 2007 estábamos ya operativos apagando fuegos por Valencia. De allí, en 2008, dejé el mando de la UME, una unidad de excelencia y sacrificio que es la que está trabajando hasta hoy en día. Es una unidad modélica, de sacrifico y disponibilidad, con un magnífico general jefe [el teniente general Javier Marcos].
P. Hay que entender el contexto, con tragedias naturales que propiciaron el nacimiento de la UME.
R. Fue decisivo. Hay que reconocer el acierto del presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero tras las nevadas de Burgos [2004] y la tragedia del incendio de Guadalajara [2005]. El Estado no tenía un instrumento especializado de verdad, había un puesto de mando de protección civil que era mínimo y ridículo. Podía haber sido otro Ministerio el que lo hubiera impulsado, pero fue Bono, que tenía mucho peso político. Trabajamos y salió todo adelante. Ni la General Motors ni la Coca-cola podrían haber hecho algo así en el tiempo que lo hicimos. Se analizaron modelos extranjeros, como el francés -que es muy bueno- o el suizo, entre otros países, y se diseñó la organización, funcionamiento y equipamiento de la unidad.
P. Una Unidad que es punta de lanza de las Fuerzas Armadas en despliegues como el de Valencia.
R. Está la UME, pero recordemos que bajo la dirección del Ministerio del Interior y de la UME se ponen medios y se entregan al director de Emergencias de la Comunidad Autónoma, que es quien lleva la dirección de la emergencia. Si me lo permite, le diré que ahí está el punto clave, desde mi punto de vista, de no haber hecho las cosas bien. El 29 de octubre por la tarde tenemos el presagio de esta gota fría. Falló la alerta, la preemergencia y la emergencia meteorológica, y también de los cauces y canales de responsabilidad. No se alertó a tiempo. Se podía haber alertado antes.
P. El presidente Mazón declaró el nivel 2 de emergencia.
R. Cuando se declara nivel 2, que lo declara el presidente de la Comunidad Autónoma [en referencia a Carlos Mazón], le habría recomendado ante la magnitud de la catástrofe que se declarara la emergencia nacional de nivel 3. Él no ha sido capaz con los medios que tiene de gestionar de la mejor manera posible la emergencia. Admito a todos los que han intervenido, especialmente a los ciudadanos, pero las cosas hubiesen ido muchísimo mejor si Mazón hubiera dicho que fuera el Estado, a través de su legislación y normativa, quien lo gestionara.
P. ¿Cree que en algún momento lo sopesó?
R. No sé si Mazón lo hizo o no. Pero independientemente de pedirlo, la responsabilidad recae en el ministro [del Interior, Fernando Grande] Marlaska y en el presidente del Gobierno. Ellos sabían la magnitud de la catástrofe. Saben que una Comunidad Autónoma es incapaz con sus medios. Y una Comunidad que además está en shock. Marlaska, a 24 horas de la tragedia, debería haber dicho: “Esto lo coge el Estado porque así lo recoge la legislación”.
P. ¿Habría cambiado algo?
R. Al coger el Ministerio del Interior la dirección de la catástrofe bajo orden de la Presidencia del Gobierno, hubiese puesto debajo de él el mando operativo de la crisis en la organización más capaz y potente, que es la UME, en nivel 3 y con un puesto de mando de alta capacidad, para integrar en este proceso de dirección todos los medios de las Fuerzas Armadas, así como todos los medios de las administraciones públicas necesarias y los medios de las demás administraciones, como lo son las Comunidades Autónomas. La UME está entrenada para hacer esto. Y no haber hecho esto ha dejado que la gestión no vaya como podría haber ido desde el primer momento.
P. ¿Por qué cree que no se hizo?
R. ¿Dónde estaban el señor Marlaska y Sánchez en estos momentos? Conocían la magnitud de la tragedia, pero estaban huidos, distantes y dando la espalda. Se hubiesen salvado vidas si las cosas se hubiesen hecho de otra manera, si se hubiese dado apoyo de unidades militares a través de Interior y Defensa. De ahí la indignación de muchos militares y ciudadanos. Hay cosas que a nivel político mandan, pero al no declarar el nivel 3 el señor Marlaska y el señor Sánchez son responsables de denegación de auxilio, de no hacer sus deberes. No es un problema ético, es mucho mayor, es de salvar vidas. Y no han dado el auxilio que en estos momentos Valencia y otras Comunidades como Andalucía o Cataluña hubieran necesitado.
P. A estas alturas, ¿aún se puede declarar el nivel 3?
R. Están a tiempo de hacerlo, pero no lo van a hacer. ¿Recuerda la historia del covid? Si hubiera sido así, con un puesto de mando en Torrejón de Ardoz, se hubiesen salvado vidas evitando descoordinaciones. Pero Sánchez tiene pánico de aplicar la ley estatal en la Comunidad Autónoma porque es prisioneros de ellos. Nos hubiésemos ahorrado muchas vidas, habríamos actuado mejor, integrando a Sanidad, Fomento, Economía, Hacienda… Hay capacidad para hacerlo. Y nos hubiésemos ahorrado problemas como las compras de mascarillas a intermediarios corruptos que se llenaron los bolsillos.
P. ¿De qué serviría ahora declarar el nivel 3?
R. Todavía debe declarar el nivel 3 para la reconstrucción, para que en la dirección de la reconstrucción de la Comunidad Autónoma esté implicado el Estado. Es nauseabundo el que no se haya hecho por incompetencia, despiste, o porque la preocupación que tienen desgraciadamente a nivel político es tapar otros problemas. Ahora se tiene que afrontar la normalización, recuperar vías, carreteras, la logística, la alimentación; debería estar el Estado dirigiendo esto. No se trata de que un Consejo de Ministros prometa 10.000 millones que nunca van a aparecer, ni de que Mazón pida 32.000 millones. Es el Gobierno el que tiene que remangarse e ir a Valencia.
P. ¿Cuánto tiempo cree que deben quedarse las Fuerzas Armadas en Valencia?
R. El que haga falta. El que haga falta y más.
P. Actualmente hay cerca de 7.800 militares. ¿Cree que son suficientes estas capacidades?
R. “Suficiente” nunca lo es dentro de una tragedia como esta. Tendrá que venir una tarea enorme de normalización tras esta tragedia. El Estado debería estar, no dejando la papeleta a Mazón. Esto es de lo que acuso a Marlaska y al presidente del Gobierno.
P. La UME tiene representa cerca de 2.000 de esos 7.800 efectivos.
R. Se critica ahora al teniente general Marcos de manera cruel e injusta. El general Marcos ha cumplido órdenes de la ministra de Defensa [Margarita Robles]. Quizá le hubiera gustado decir que lo que ha fallado es que no se ha aplicado el nivel 3, pero no lo puede decir porque es meterse en terreno político, y no puede. Pero yo que sí soy político tengo la obligación de acusar al ministro del Interior y al presidente por dejadez e incompetencia, por priorizar el sectarismo político a salvar vidas.
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