El relato de Juana Rivas gana el respaldo de su hijo y de la justicia italiana. La madre granadina fue condenada en 2018 por haber huido un año antes con sus dos hijos menores. Se le acusó de sustracción de menores, la lucha de Rivas se convirtió en un símbolo de resistencia ante el maltrato que, sin embargo, las resoluciones judiciales no apoyaron.  

La granadina que afirmó que en 2017 huyó de su marido en Italia para salvarse a sí y a sus hijos fue condenada en España. Ahora, el nuevo giro judicial llega desde Italia. La Fiscalía de Cagliari ha presentado un escrito formal de procesamiento contra Francesco Arcuri, expareja de Rivas, por presuntos malos tratos a sus hijos, Gabriel y Daniel.  

El foco está en la situación del hijo menor, Daniel, quien aún vive con su padre en Carloforte, a pesar de las denuncias y del fallo del Tribunal Supremo italiano que ordena revisar la custodia. El hijo mayor de edad ya vive con su madre en España.

Por su parte, la defensa del padre, Francesco Acuri en España, ha asegurado que su cliente no ha recibido notificación alguna por el momento y que su situación procesal no ha cambiado en Italia, según recoge ABC.

"En 2017 a mis 11 años me arrancaron de mi casa, que es mi madre” 

En 2017, Juana Rivas desapareció durante un mes junto a sus dos hijos para evitar entregarlos a Arcuri, alegando que temía por su seguridad. En 2009, Arcuri había sido condenado en España por lesiones contra Rivas, quien lo denunció nuevamente en 2016. Pero la huida de Rivas le costó cinco años de prisión por sustracción de menores, pena que fue reducida a la mitad y, posteriormente, conmutada en 2022 por un indulto parcial. Desde entonces, Rivas ha trabajado para recuperar la patria potestad de los niños con ingente apoyo social. 

En 2023, el Tribunal Supremo italiano anuló la sentencia que había separado a los dos hermanos y ordenó repetir el juicio civil por la custodia. La Corte concluyó que el proceso previo vulneró el principio del interés superior de los menores y varios convenios internacionales. Sin embargo, la resolución no se ha ejecutado y Daniel sigue viviendo con Arcuri. 

“Violencia física, vejaciones, insultos y amenazas”  

El escrito de la Fiscalía italiana detalla que Arcuri habría sometido a sus hijos a "violencia física, vejaciones, insultos y amenazas" de forma habitual, según la documentación facilitada por el equipo jurídico de Rivas. Ahora, Arcuri podría enfrentar hasta a siete años de prisión.  

A día de hoy, explica el equipo de abogados de Rivas,  sigue sin ejecutarse la sentencia de Casación del tribunal italiano, tampoco hay medida cautelar alguna para la protección de Daniel  que “continua estando obligado a vivir en Carloforte con su padre Francesco Arcuri, imputado formalmente por maltratarle".  

La defensa de Rivas solicita medidas urgentes para proteger al menor, ante lo que consideran una situación de alto riesgo y para ella expone un vídeo con una declaración consentida del hermano mayor. 

Gabriel, ahora mayor de edad, vive con su madre en España. El joven ha querido tomar la voz para pedir medidas por la seguridad de su hermano. En una carta enviada a la Fiscalía de Cagliari describe con detalle los años de convivencia con su padre en Italia. Afirma haber sufrido "continuos ataques físicos y verbales" y que su hermano menor vivió episodios similares. Según Gabriel, Arcuri lo golpeaba, lo tiraba al suelo y lo encerraba en una habitación. También relata que su hermano lloraba por las noches buscando a su madre, y asegura que actualmente "se siente en riesgo de muerte". 

La documentación remitida por la defensa de Rivas que ya está distribuida también en italiano a los medios de comunicación, se muestran los numerosos episodios de violencia y agresiones con las lesiones causadas en el hermano menor. 

Vídeo 

El doble testimonio de Gabriel, a través de la carta y el vídeo, revela que tras regresar a España en 2022 quedó marcado por los años de maltrato. Relata haber desarrollado adicción a sustancias y haber perdido el rumbo de su vida durante su adolescencia, "volví como un juguete roto", confiesa en su carta. Ahora, intenta alertar sobre la situación de su hermano Daniel, señalando que Arcuri no puede controlar su ira y que su hermano está en peligro.  

En su vídeo, Gabriel apela directamente a las autoridades italianas, pidiendo que se adopten medidas para que el menor pueda vivir con su madre y así evitar más daños. Daniel “sigue viviendo en ese infierno, vive con un maltratador a su lado”, expone en un testimonio a cara oculta, “él -dice Gabriel sobre su hermano- se siente en riesgo de muerte, yo me he sentido en riesgo de muerte, mi reflejo lo veo en él y no sé como en 2024 pueden estar sucediendo estas cosas” 

Juana Rivas sigue luchando por la custodia de Daniel. Sus abogados recalcan que las medidas de protección deben ser inmediatas. Señalan que la falta de acción por parte de las autoridades italianas perpetúa una situación de riesgo para el menor mientras que el litigio se prolonga seis años ya.