La fortuna secreta que Luis Bárcenas llegó a acumular en Suiza ha empezado a 'retornar' a España. Hace escasos días llegaron los primeros 3,5 millones de dólares (2,6 millones de euros), un dinero que estaba oculto en una cuenta de EEUU y que ahora descansan en una céntrica sucursal bancaria de la Plaza de Colón de Madrid, muy cercana, precisamente, a la sede de la Audiencia Nacional. Este dinero forma parte de los 3 millones de euros que el extesorero del PP sacó de sus depósitos en el país helvético en 2009, al poco de estallar el 'caso Gürtel', para ser transferidos a la cuenta en Nueva York de la empresa uruguaya Brixco, propiedad del que fuera responsable de las finanzas del AP Ángel Sanchis Perales. Ha sido precisamente éste el que ofreció al juez Pablo Ruz repatriar el dinero a nuestro país poco antes de que le impusiera una fianza de responsabilidad civil de 8 millones de euros por su presunta participación en las maniobras para poner a 'salvo' el dinero del político ahora encarcelado.
El dinero ahora repatriado llevaba meses en una cuenta en Nueva York sin poder ser intervenido judicialmente porque las autoridades de EEUU se habían negado a hacerlo
La peripecia judicial de esta millonaria cantidad de dinero ha sido larga desde que el titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 detectase su salida desde el Dresdner Bank de Ginebra gracias a la primera remesa de documentación que remitieron las autoridades de Berna a la Audiencia Nacional a finales de 2012. Entonces, se conoció que una parte de la fortuna del extesorero del PP había salido poco de estallar el caso Gürtel' desde paraíso fiscal centroeuropeo al otro lado del Atlántico, en concreto, a una cuenta en el HSBC de Nueva York de Brixco. El posterior rastreo judicial de los movimientos de ésta permitió saber que lfortuna había saltado supuestamente a otro depósito de una segunda empresa uruguaya, Rumagol, y de ahí a una tercera, abierta a nombre de la empresa TQM Capital, propiedad de uno de los hijos de Sanchis. El juez Ruz pidió entonces a las autoridades estadounidenses su bloqueo, pero éstas rechazaron tomar esta medida y se limitaron a facilitar información detallada sobre los movimientos de la misma.
La dinero permaneció allí sin bloquear hasta que el pasado 28 de octubre el instructor del 'caso Gürtel' dictó un auto por el que impuso una fianza de 8 millones de euros a Ángel Sanchis y éste ofreció, precisamente, el saldo en esa cuenta como parte de la misma. Según señalaba el empresario en un escrito que remitió a la Audiencia Nacional el pasado 5 de noviembre, la cuenta tenía aquel día 3,5 millones de dólares (2,6 millones de euros) que ponía en ese momento a disposición del juzgado, junto a 1,7 millones de acciones de la empresa con la que explotaba su latifundio argentino de limones, como garantía para hacer frente a las futuras responsabilidades económicas que pudieran recaer sobre él. El magistrado, con el rspaldo de la Fiscalía Anticorrupción, aceptó el ofrecimiento del imputado "dado que no se ha llevado a efecto el bloqueo interesado por comisión rogatoria".
Cruce de escritos
Así, el 18 de noviembre, el magistrado dictó un auto en el que daba un plazo de diez días al exresponsable de finanzas de la antigua Alianza Popular para que remitiera la millonaria cantidad a "una cuenta que pueda ser bloqueada por este Juzgado", es decir, en España. No hizo falta agotar el plazo. Dos días después, los abogados del empresario registraban un escrito en la Audiencia Nacional en el que informaban al magistrado que el dinero sería finalmente transferido en los días siguientes a una cuenta que abierta en una céntrica sucursal de la capital en la que el empresario cobra su pensión, pero solicitaban al juez que antes de hacerlo tomara las medidas pertinentes para que el millonario movimiento de dinero no disparase la alarma ni de la propia entidad financiera ni del Servicio de Prevención de Blanqueo de Dinero (SEPBLAC). El juez accedió a ello el 22 de noviembre y días después se ha producido el trasvase de dinero.
Fuentes del entorno de Sanchis insisten a este diario que el empresario no participó nunca en maniobras para ocultar el dinero de Bárcenas y que los 3 millones de euros que llegaron a la cuenta en Nueva York de Brixco eran, en realidad, un préstamo. De hecho, el empresario presentó en el juzgado el supuesto contrato del mismo, en el que se detallaba que la amortización debería iniciarse, precisamente, el próximo mes de enero. "Cuando llegue ese momento, haremos lo que el juez nos diga con ese dinero", añaden. Mientras tanto, el magistrado mantendrá bloqueado los 3,5 millones de dólares (es la moneda en la que han sido transferidos los 2,6 millones deuros), pero no el resto del dinero que se encuentra dspositado en la misma.
Y otros 17,5 a la espera en Suiza
El grueso de la fortuna de Bárcenas sigue, sin embargo, fuera de España, aunque una parte importante de la misma también está ya bloqueada judicialmente. Se trata de los 17,5 millones de euros que aún conservaban en las cuatro cuentas que aún tenía abietas a nombre de dos empresas pantallas, las uruguayas Tesedul SA y Granda Global SA. Dos de las cuentas están en el LGT Bank (la entidad que absorbió al Dresdner Bank, la entidad donde comenzó a operar el exsenador). La primera, con Tesedul SA como titular e Iván Yáñez, su presunto testaferro, como beneficiario, acumulaba en el momento de su bloqueo 7.087.763 euros. La segunda, en la que ya figura el nombre de Bárcenas aunque el titular es Granda Global, la cuantía era mucho más humilde: 195.026 euros.
De las dos cuentas restantes, ambas abiertas en el Lombard Odier, la de mayor saldo es la que el extesorero tenía abierta a nombre de Tesedul SA. Ésta tenía 9.099.173 euros en junio de 2013. La última, también con Bárcenas como beneficiario de la misma aunque el titular que figura es la otra sociedad 'fantasma', estaba abierta en el Banque Syz. Su saldo, también millonario: 1.205.064 euros. En total, las autoridades Suiza tienen intervenidos 17.587.026 euros propiedad del exsenador. Cuando será retornada a España, sin embargo, es aún un misterio. Las autoridades helvéticas han mostrado su disposición a seguir colaborando, pero también han reclamado al juez Ruz que le transmita "una estimación del plazo" que tardarán las autoridades españolas en adoptar una decisión final sobre qué hacer con el dinero bloqueado. Hace unos meses, el fiscal de Ginebra, Jean-Bernad Schmid, aseguraba a un medio de comunicación suizo que el bloqueo del dinero del extesorero se había producido tanto por la petición española como por iniciativa de la justicia helvética, que mantiene abierto su propio proceso contra Bárcenas por el delito de blanqueo de capitales. No obstante, el fiscal recalcó que, si finalmente una sentencia confirma la confiscación del dinero, la intención de las autoridades de Berna es entregar los fondos a España.