Podemos barajó entre 2019 y 2020 contratar a una empresa externa para controlar toda su intranet, así como los mensajes internos de sus cargos, las votaciones de las primarias, los datos de los militantes y todo otro tipo de datos sensibles. Después del golpe de Íñigo Errejón y en pleno proceso de purga, la dirección quiso poner un cerrojo informático. Se dirigió a una empresa de espionaje con sede en Andalucía que el gobierno de Ecuador había fichado para supuestamente controlar la actividad de Julian Assange en su embajada en Londres. El nombre de esta empresa, UC Global, ha reflotado ahora por dos pagos realizados por Unidas Podemos en la campaña electoral de 2019.
La empresa que el partido tanteó, UC Global, trabajó para la embajada de Ecuador y su dueño, el exmilitar David Morales, tuvo que declarar en febrero de 2020 en el juicio de la Audiencia Nacional sobre el supuesto espionaje a Assange después de una investigación de El País. Ese espionaje consistía en grabar las llamadas y los movimientos del ciberactivista durante su estancia en la legación diplomática.
Según fuentes de Podemos, la cúpula del partido también contactó con esta firma de espionaje. La intención de la cúpula morada era desligar todo tipo de actividad interna del equipo de informáticos del partido por temor a que denunciaran irregularidades.
Por aquel entonces, el partido vivía momentos convulsos. En casi todos los territorios se multiplicaban las denuncias de pucherazo en las primarias y se señalaba al sector pablista, interesado en eliminar al errejonismo y frenar las corrientes críticas. La polémica se centraba en el sistema de primarias, que se modificó desde Vistalegre II (cuando también se apagó el sistema de Transparencia) con la eliminación del cruce de datos, interno y externo. El caso empeoró tras el cese de dos exabogados que denunciaban varias irregularidades, y la dirección de Podemos empezó a desconfiar de sus trabajadores.
"Controlarlo todo desde fuera"
La cúpula de Pablo Iglesias que buscaba un topo sospechó del equipo de informáticos, un grupo reducido de profesionales a sueldo del partido pero que tenían la “llave” de los procesos internos y que podían desvelar información sensible. El equipo liderado por Juanma Del Olmo, jefe de campaña de 2019 y hombre fuerte del gabinete de Iglesias en el Gobierno, planteó despedir a todos ellos y contratar a UC Global con la intención de controlar a través de una empresa externa amiga todos los procesos informáticos: desde las primarias hasta la intranet donde se graban las conversaciones de los cargos electos y administrativos, según afirman fuentes conocedoras de esa operación. "Lo querían controlar todo desde fuera", agregan.
La contratación, sin embargo, fracasó cuando, a finales del pasado verano y como desveló Vozpópuli, una carta anónima, cuya autoría se vinculaba a miembros del equipo informático de Podemos, amenazó con tirar de la manta en caso de despido. La misiva circuló en el partido y en ella se detallaba cómo la falta de control externo permitía influir en las primarias borrando los votos de los territorios (hasta barrios) en los que se habían consolidado los sectores críticos. La carta mencionó explícitamente un “sistema de fraude” en las primarias de 2018, en el que incluyeron la consulta del chalet de Iglesias e Irene Montero.
Ahora ha trascendido la información de que el juez Juan José Escalonilla, que investiga el caso Neurona, ha detectado dos pagos en 2019 de Podemos a esa empresa de espionaje. Se trata de dos transferencias por un total de 10.000 euros, que ha adelantado Okdiario y ha comprobado este diario, de las que se desconocen los detalles. Pero fuentes de Podemos sostienen que pueden corresponder al proyecto piloto y la primera toma de contacto con UC Global durante la operación, luego fracasada, de despido masivo de los informáticos y control de la dirección sobre la intranet de la formación.
Relación con IU
La firma UC Global es conocida en el entorno de Unidas Podemos. Fuentes de la coalición desvelan que Izquierda Unida ya ha contratado a esta sociedad, y sostienen incluso que UC Global ha tenido acceso a algunos datos sensibles de Podemos, a los que han podido acceder también altos cargos de IU. “Querían darle acceso a los servidores, con los datos de los afiliados y la intranet con las conversaciones de los cargos, sin saber que permitía a IU tener acceso a esos datos por su relación con esta empresa”, afirman. Otros sostienen que la dirección acabó entregando "una copia de todo Podemos".
En este entramado de relaciones entre España y América Latina, todo apunta a que hay que añadir otra pieza, vinculada al espionaje y control informático. UC Global está relacionada con el expresidente de Ecuador Rafael Correa, puesto que fue él quien contrató desde 2012 a esta firma para supuestamente espiar a Assange.
Las relaciones de Podemos con Correa vienen de antaño y siguen siendo buenas. El gobierno de Ecuador empujó la creación de Podemos, sobre todo a través de la PAH, y formó a algunos cuadros. Su Ejecutivo contrató también a otras empresas vinculadas a miembros de la actual cúpula morada. Después de Correa, el nuevo presidente Lenin Moreno enfrió esa relación (e interrumpió el contrato con UC Global). Pero el nuevo candidato presidencial, Andrés Arauz, ha decidido reanudar los puentes con los morados. Concretamente con Neurona, la consultora cercana a Juan Carlos Monedero, que, como adelantó este diario, es beneficiaria de un contrato millonario para la campaña presidencial de este año.