Pablo Casado reclutó a Adolfo Suárez Illana, hijo del primer presidente del Gobierno de la democracia, para su proyecto de la regeneración del nuevo Partido Popular. Ahora medita ofrecerle un puesto en las listas para las generales del 28-A, por las circunscripciones de Madrid o de Ávila.
Casado estudia estos días con su equipo de Génova un buen número de nombres para renovar las listas a las elecciones parlamentarias de finales de abril. Madrid será una de las plazas clave de estos comicios y en el PP se afanan por reclutar algunos nombres con fuerza para reforzar el cartel electoral que encabezará Casado. Suárez Illana aparece ahora en los rumores que circulan por el partido, posiblemente como número tres. El número dos sería para una mujer aún por determinar, según estas versiones.
Suárez, uno de los hombres de más confianza del nuevo presidente del PP, fue el encargado de coordinar los trabajos de la Convención Nacional celebrada por el PP el pasado mes de enero, en el que se planteó el marco ideológico para dar la batalla de las próximas citas electorales. Contó para ello con el apoyo de Javier Fernández Lasquetty y de Isabel Benjumea, en su momento vinculados a Faes y al aznarismo.
El nombre de Suárez aparece también vinculado a Ávila, la provincia en la que nació su padre y hasta ahora, la circunscripción que ha venido encabezando el propio Casado. Reforzaría así la lista del PP en esta provincia, en la que también figurará José Ramón García Hernández, responsable de asuntos internacionales de la formación y en su día rival de Casado en las primarias que se convirtió luego uno de sus más firmes colaboradores.
Sustituto de Faes
El hijo del expresidente también sonó en su día como candidato a la Comundiad o el Ayuntamiento de Madrid, escenario que no se concretó ya que el propio interesado declinó esta posibilidad. Suárez, que es presidente de la Fundación Concordia, el instituto de pensamiento político creado por Casado para sustituir a la Faes de José María Aznar. Suárez se presentó en su día como candidato a la presidencia de Castilla la Mancha, en tiempos de Aznar, pero resultó derrotado por José Bono y desistió de asumir su escaño por Albacete.
La designación de Inés Arrimadas como número uno de Ciudadanos por Barcelona ha metido presión al PP de cara a la elaboración de sus listas. Casado quiere redondear una renovación en su oferta electoral. Algunas de las 'vacas sagradas' de la formación ya han dado un paso atrás y han optado por retirarse de la contienda. Celia Villolobos anunció la semana pasada que dejaba su escaño y sus ambiciones.
También lo han hecho otros diputados sin mucho futuro, como Teófila Martínez o Rafael Merino, que han encontrado acomodo en la Junta que preside Juanma Moreno. También se van veteranos como García Tizón o Teófilo de Luis, con muchos años en la bancada de los populares. Otros nombres se caerían de las listas por diferentes motivos, como elexminsitro del Interior Jorge Fernández o quien fuera su secretario de Estado, Francisco Martínez, ambos salpicados por el escándalo de la 'Kitchen'.
