La propuesta de Carolina Bescansa para la reforma constitucional fue acogida con recelo entre los dirigentes de Podemos. El secretario general del partido, Pablo Iglesias, aseguró en los pasillos del Congreso que ni siquiera había podido leer el documento de 16 páginas difundido por la cofundadora de la formación morada.
Fuentes del partido la enmarcan en una propuesta a título individual cuyas conclusiones emanan de un debate interno informal mantenido por varios miembros de Podemos 2016, que en ningún momento fue elevado a los órganos de la formación política para su aprobación.
Bescansa se adelanta con la presentación de esta propuesta a la que hará la dirección estatal del partido en unas jornadas que se celebrarán a lo largo del fin de semana en Córdoba, bajo el lema 'Volver a mirarnos. Nuevos acuerdos para la España que somos'.
En ellas participarán los miembros de la cúpula que abordarán "la posibilidad y la necesidad de abrir un proceso constituyente que suponga el inicio de una nueva etapa en la historia del país, ante un horizonte que se debate entre una reforma constitucional que puede cerrar 'por arriba' la brecha abierta el 15 de mayo de 2011 y un cambio constituyente que profundice el mandato de cambio expresado por una mayoría social".
Precisamente, la ex Secretaria de Programa y Proceso Constituyente no participará en dichas jornadas, aunque también se desplazará a Andalucía para participar en un debate sobre la reforma constitucional este viernes en la Universidad de Sevilla. "Será un placer exponer las propuestas que defendemos para hacer frente a la grave crisis de la estructura territorial española", asegura Bescansa.
Por su parte, Irene Montero también participará este viernes en Navarra junto a los diputados Edu Santos y Marcelo Expósito en Navarra, en el marco de la ruta por España que ha impulsado el partido para explicar la directamente a la militancia el modelo plurinacional que defiende.
Bescansa fue apartada de la primera línea en el Congreso y hace pocas semanas la propia Montero ocupó su puesto en la Comisión Consitucional tras las críticas vertidas a la estrategia planteada por Iglesias frente a la crisis secesionista en Cataluña.