Banco Santander amplía el Expediente de Regulación de Empleo a otras 460 personas, y afectará especialmente a los Servicios Centrales que están en la sede del Centro Corporativo del banco en la localidad madrileña de Boadilla del Monte. Con esta ampliación el ERE provocará la baja de unas 1.660 personas.
El ERE se llevaría a cabo con prejubilaciones a partir de los 55 años y un plan de bahjas incentivadas con indemnizaciones de 40 días/año
El banco ofrece para todas las salidas dos alternativas: o bien un plan de prejubilaciones para todos los empleados a partir de los 55 años, a los que se ofrecería un 70% de su salario según convenio. Además, habría un plan de bajas incentivadas "con indemnizaciones de 40 días por año y un máximo de dos anualidades", según ha explicado en una nota urgente el sindicato Comisiones Obreras, que consideran un plan de bajas "excesivo" con condiciones de salida "insuficientes".
El pasado miércoles las fuentes presentes en la negociación informaron que el ERE implicaría a un total de 1.200 personas, si bien habían quedado pendientes de nuevos ajustes en reuniones posteriores. El ajuste previsto impactaría sobre todo en la red de sucursales, donde se prescindiría de unos 900 trabajadores, entre el 13% y el 14% de los empleados de las oficinas. El resto, más de 200 trabajadores, se despedirían en los Servicios Centrales.
El banco adelantó a los sindicatos con representación en la entidad su intención de llevar a cabo el cierre de entre 425 y 450 oficinas en España, incluida una reducción sustancial en los llamados Servicios Centrales. La intención de las plataformas sindicales, según han manifestado desde que se conociese la intención de llevar a cabo un ERE, es preservar el mayor empleo posible. Otra de las opciones para evitar despidos indeseables serán las bajas incentivadas y las prejubilaciones, que en el último ERE afectó a personas de 55 años en adelante.