Las autoridades rusas han ampliado este jueves sus registros en restaurantes de la multinacional estadounidense de comida rápida McDonald's, un día después de cerrar temporalmente cuatro establecimientos de Moscú y en plena disputa política entre Rusia y Estados Unidos por el conflicto ucraniano.
La agencia de seguridad alimentaria rusa (Rospotrebnadzor) ha alertado de supuestas irregularidades en McDonald's. Según ha explicado, "ha habido quejas sobre la calidad y seguridad de los
productos" que ofrece esta cadena, que contaba en 2013 con 438 restaurantes en Rusia.
"Las inspecciones se realizan por las quejas de los ciudadanos sobre la calidad de los productos" de McDonald's, explicó la portavoz del departamento regional de Sverdlovsk, Natalia Lukiántseva, citada este jueves por la agencia Interfax. Sin embargo, agregó que las represalias no afectarán a todas las sucursales sino a aquellas sobre las cuales se han presentado las denuncias.
El regulador, que ha negado cualquier trasfondo político, ha informado de registros en restaurantes de las regiones de Sverdlovsk, Tataristán, Voronezh y Moscú. También tiene previsto ampliar estas comprobaciones a establecimientos de la república de Bashkortostán y la región de Krasnodar.
Una portavoz de McDonald's ha reiterado la disposición de la empresa, "abierta a cualquier registro". Sin embargo, no ha querido comentar las posibles razones tras esta campaña emprendida por Rospotrebnadzor.
El mes pasado, la oficina de esta agencia en Novgorod presentó una denuncia contra McDonald's por considerar que engañaba a los consumidores sobre el valor energético de
las hamburguesas y las propiedades nutricionales de los postres. Además, alegó que la ensalada contenía una bactería perjudicial para la salud.