La selección española de fútbol es un valor que cotiza a la baja; al menos para las televisiones. El desinterés de las cadenas nacionales por retrasmitir el partido de este viernes contra Bielorrusia ha marcado un punto de inflexión en la emisión de un evento deportivo que se supone de interés general. El alto precio de los derechos televisivos, no obstante, hace que los responsables de las empresas audiovisuales se lo piensen más de dos veces antes de desembolsar las millonarias cifras que cuesta un partido de ‘La Roja’.
Pero más allá del encuentro oficial frente a Bielorrusia, todavía está en el aire la emisión del campeonato más importante de este deporte: el Mundial. Quedan menos de dos años y por ahora las televisiones españolas no han comprado los derechos del campeonato que se celebrará en Brasil. Fuentes del sector aseguran que tanto TVE, como Mediaset España y Grupo Antena 3 han pujado por los derechos, pero sobre la mesa han puesto una cantidad muy a la baja. La subasta, por ello, está paralizada sin visos de que se resuelva a corto plazo.
Mediaset España ha reconocido públicamente su interés por el campeonato para continuar con su estrategia de que "el deporte sea también una parte de la programación que diferencia al grupo, donde también ofrecemos tenis y motociclismo", tal y como aseguró recientemente Manuel Villanueva, director de Contenidos.
Los derechos deportivos son arma de doble filo para las televisiones: proporcionan importantes índices de audiencia, pero conllevan elevados costes de difícil amortización publicitaria incluso en época de bonanza. Y más en tiempos de crisis, que junto al desplome del mercado publicitario, han llevado al grupo, y al sector en general, a ser más cautos tras el gol en propia puerta que les supuso la retrasmisión de la Eurocopa este verano. Mediaset desembolsó cercad de 70 millones que no recuperó. El único rendimiento que sacó al evento fue rentabilizar su “imagen de marca”, en palabras del propio Villanueva.
En el último Mundial, el de Sudáfrica, supuso cerca de 70 millones de euros de pérdidas. Hasta 90 millones de euros pagó por los derechos FIFA más otros 15 de costes de retrasmisión. Pese a las audiencias millonarias, el retorno de la publicidad fue de unos 35 millones de euros.
Grupo Antena 3 reitera su interés por el deporte, pero siempre "bajo criterios de máxima rentabilidad"
A pocas horas para que se juegue el encuentro de la selección española en Minsk ninguna de las tres grandes cadenas generalistas de televisión tiene previsto ofrecer el partido. Fuentes de TVE informaron a EFE de que no retransmitirán el partido, mientras que desde Mediaset señaló que "de momento no hay ningún acuerdo cerrado". Fuentes del Grupo Antena 3 han reiterado su interés por el deporte, pero siempre "bajo criterios de máxima rentabilidad".
El Consejo Superior de Deportes (CSD) se ha mantenido al margen de la negociación y pretende evitar situaciones como ésta en el futuro, con una regulación sobre la adquisición de derechos audiovisuales en la nueva ley del deporte, que reformará el del año 1990, informaron a EFE fuentes de este organismo.
