Una de las posesiones más antiguas de la Familia Real griega va a ser vendida al mejor postor. El palacio de Tatoi, el primer hogar de la Reina Sofía y donde están enterrados sus padres ha sido puesto a la venta, según recoge Europa Press.
Esta acción ha ocurrido a causa de la profunda crisis que está viviendo Grecia en estos momentos, y la que fue residencia de los reyes griegos durante más de un siglo ahora pasará a disposición de una lista de privatizaciones de bienes inmobiliarios impuesto por el Gobierno de Grecia, según ha informado el diario Expansión.
El Palacio de Tatoi está situado el norte de Atenas, escondido entre un frondoso bosque donde se encuentra lo que en su día fue una lujosa residencia de la Familia Real griega, y que ahora, a acusa de la falta de fondos públicos se ha convertido en un lugar abandonado y olvidado.
Precisamente por este motivo la Familia Real griega ha cedido este edificio ahora propiedad del Gobierno, para intentar que se recupere esta residencia real, que en su día fue uno de los edificios más majestuosos del país.
Resulta que en este palacio era propiedad del exrey griego Constantino II, hermano de la Reina Sofía y era conocido como un mausoleo de reliquias, y fue el lugar donde vivieron los reyes Pablo y Federica, y sus hijos Constantino, Irene y Sofía, y residen muchos de los recuerdos de juventud de nuestra reina.
Este lugar fue confiscado en el año 2003 por el Estado griego tras pagar una indemnización de aproximadamente 14 millones de euros, pero tras esta cesión será presentado en una subasta, en la que los recuerdos de la infancia de Doña Sofía serán vendidos.