El complejo contexto económico en el que vivimos no ha sido barrera para el sector nupcial. A pesar de que muchas bodas tuvieron que ser canceladas por el COVID, en 2023 se superó el número de matrimonios registrados antes de la pandemia, un total de 172.430, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Uno de los responsables de este auge es la generación Z y su creciente interés en estos enlaces.
El 63% de los jóvenes considera que el matrimonio es uno de los momentos más importantes de la vida, según el Wedding Trends to Watch Report 2025. En esta línea, un 86% de las parejas pertenecientes a la Generación Z planea casarse en el futuro. Este creciente interés también se revela en el Informe del Sector Nupcial 2025, elaborado por Bodas.net: las bodas de este grupo aumentaron un 18% en 2024.
De esta manera, se desmiente esa creencia de que el matrimonio era “un concepto pasado de moda” para los jóvenes. El 58% tiene la intención de casarse por lo legal, mientras el 28% lo está considerando.
“Que los jóvenes vean las bodas como una celebración que quieren vivir es muy alentador para el sector”, cuenta a Vozpópuli Cristina González, responsable de prensa y comunicación de Bodas.net. Argumenta que el hecho de que influencers estén celebrando sus bodas a edades tempranas, “puede estar despertando ese gusanillo por una tradición que nunca ha dejado de ser popular”.
Las prioridades de las parejas en las bodas
La atención y experiencia de los invitados sigue siendo una de las principales preocupaciones de los novios (80%). El banquete (68%), la decoración (58%) y personalización (54%) de la ceremonia son también considerados esenciales. No obstante, con el paso del tiempo han ido apareciendo nuevas necesidades que han dado lugar a nuevas figuras relevantes, como el Wedding Content Creator o el Pet Sitting.
En los últimos años, “ha habido una evolución hacia bodas mucho más personalizadas que reflejan el carácter y la personalidad de la pareja en cada detalle”, dice Cristina González. Asimismo, añade que ahora se busca algo más “íntimo” y ya “no invitan a personas por compromiso”.
“Otro cambio que hemos visto ha sido el de alargar las bodas a dos días o más”, revela la responsable de comunicación de Bodas.net. Casi el 70% de los casamientos contaron con eventos durante varios días. “Un día sabe a poco, las parejas quieren exprimir esa celebración al máximo y estar acompañados de sus seres queridos”, comenta González.
La popularidad de las redes sociales también ha llegado a las bodas. Muchas parejas las usan para buscar inspiración para sus ceremonias. Además, el 77% de los matrimonios comparten su unión por Internet, siendo Instagram la plataforma preferida (91%).
Presupuesto y financiación
Aunque la economía no ha parado las bodas sí que ha influido en ellas. Un 48% de las parejas tuvieron más elementos de ‘DIY’ (hechos por uno mismo), un 5% más que en 2023. Un 33% se vieron obligados a reducir su lista de invitados y un 29% excluyó algunos servicios extras. Asimismo, un 41% incrementó su presupuesto al menos una vez y un 11% tuvo que pedir a familiares y amigos que contribuyeran más.
Según el informe, el coste medio de una boda en España asciende hasta los 24.618 euros, un 4% más que en 2023 (23.750 euros) y un 17% más que hace dos años (21.056 euros). Destaca que un 44% gastó 25.000 euros o más, un 23% 35.000 euros o más y un 11% 45.000 o más. El espacio de bodas es uno de los elementos de las bodas al que más dinero se destina, entre 13.000 y 14.000 euros. Aunque el 40% se llegó a gastar más de 15.000 euros y el 25% más de 20.000.
Un 40% de los matrimonios superó el presupuesto que habían fijado, mientras un 44% se ajustó y un 6% consiguió quedarse por debajo, de acuerdo con el informe. La mayoría de las parejas (48%) hizo frente a los gastos de la boda con el dinero de los regalos. Otro 39% tiró de cuenta corriente. El efectivo (31%) y ahorros de la cuenta (26%) fueron otras de las opciones más populares.
Al igual que el presupuesto, el coste medio por invitado también ha subido: de 162 a 212 euros (un 31%). Esto se ha reflejado en un descenso del número de asistentes. La media en 2024 fue de 116 personas, frente a las 121 del año anterior y las 117 del 2022. Asimismo, un 50% de las bodas tuvieron menos de 100 invitados.
No obstante, cabe destacar que “no se trata únicamente de una subida de precios, puesto que las parejas deciden también incluir más profesionales, pasando de diez contratados de media en 2023 a los doce en 2024”, cuenta Cristina González. El auge de las bodas sumado al aumento del presupuesto trae buenas noticias para el sector nupcial de cara a este 2025. Se estima que la industria seguirá generando grandes cifras. El pasado 2024 desembolsó 4.085 millones de euros de manera directa.
La luna de miel
A pesar de los cambios que ha habido en las celebraciones de bodas en los últimos años, la luna de miel sigue siendo uno de los elementos más importantes. Además de ahorrar para la ceremonia, muchas parejas tienen que hacerlo también para este viaje especial -el 41%, tres puntos más que en 2023-.
El gasto medio de una luna de miel es de 5.178 euros, aunque un 20% se gastó más de 8.000 euros y un 10% más de 10.000. El presupuesto ha subido un 13,1% desde 2022, cuando el coste medio era de 4.500 euros, según el Libro Imprescindible de las Bodas. La playa sigue siendo el destino favorito (40%), justo por detrás de la ciudad (39%). Asimismo, un 32% eligió un todo incluido.
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