Los militares del Ejército de Tierra, la Guardia Real y la Unidad Militar de Emergencias (UME) deberán pagar el 50% de la comida en las unidades a las que pertenezcan a partir del 1 de julio. Será entonces cuando entre en vigor una norma que elimina la subvención total de este servicio y con la que el Eército pretende ahorrar 15 millones de euros.
Según han declarado fuentes militares a la agencia Europa Press, el Ejército de Tierra es "plenamente consciente" de los efectos que tendrá "a nivel individual" esta nueva norma, que supone una "bajada de sueldo indirecta" para los militares pero que es necesaria para no "exceder" los límites presupuestarios del Ejército.
Desde el 1 de julio, todos los militarse deberán pagar el 50% de la primera comida durante los días laborables, incluyendo el viernes, ya que el Ejército sólo subvencionará la mitad. En concreto tendrán que pagar 2,80 euros por menú.
Alumnos y personal de guardia y de maniobras quedan excluidos
Esta medida contempla tres excepciones: los alumnos de las academias y centros de formación, el personal de guardia y el personal de maniobras. Estos tres colectivos mantendrán la subención total y no tendrán que hacer ningún pago. En las unidades, la nueva norma afectará prácticamente a la totalidad de sus miembros, ya que el personal que se encuentra de servicio supone un porcentaje muy reducido respecto al total.
El Ejército de Tierra asegura que los recortes en su presupuesto durante los últimos cuatro años suponen un 34%. En esta situación, ha tratado de aplicar medidas de ajuste de manera progresiva e intentando afectar lo menos posible al desempeño de las misiones operativas. Durante este periodo, explica, las partidas correspondientes a la vida y funcionamiento han ido disminuyendo.
La nueva norma anula una orden de 2001, por la que el entonces jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra, general Alfonso Pardo de Santallana y Coloma, garantizó por escrito lo que ya era una realidad en las unidades: la subvención al 100% de la alimentación. De esta manera, a partir del 1 de julio se aplicarán estrictamente las órdenes ministeriales de 1993 y 199 que regulan el derecho a la alimentación en las Fuerzas Armadas, según las que sólo tienen derecho a una plaza subvencionada en su totalidad los alumnos de centros de formación y academias y el personal de servicio.
La norma de 1999 establecía además que, anualmente, el subsecretario de Defensa podría determinar unidades que por su "carácter de excepcionalidad" garantizarían el 100% de la alimentación a sus miembros. La excepción se garantizó a todos los militares de la Fuerza en 2001 con la citada orden del general Pardo de Santallana y Coloma.
AUME ve "alternativas" y exige examinar otros "gastos superfluos"
La Asociación Unificada de Militares Españoles (AUME) ha defendido que existen otras "alternativas" para reducir gastos en el ejército antes de recortar comidas y considera que habría que incidir en otros "gastos superfluos". En declaraciones a Europa Press, el secretario general de AUME ha pedido al Ministerio de Defensa que imponga "ahorrar con cabeza" y ha instado a que se aclare de dónde ha partido la nueva medida, que entrará en vigor el próximo 1 de julio.
"Si el ahorro en las políticas de personal pasa sólo por reducir el 50% del gasto en alimentación algo está fallando estrepitosamente", ha afirmado Casado, que, además, ha lamentado que la medida se haya tomado sin "más explicaciones". A su juicio, existen otras materias de las que "no se habla nunca" y donde podían incidir los recortes, como "celebraciones, eventos festivos, bienvenidas y despedidas o desplazamientos en medios como helicópteros", además de limitar el número de mandos con conductores. "Primero hay que ver si estos gastos son superfluos", ha señalado.
Por otra parte, Casado se ha preguntado si "nadie ha estudiado" la posibilidad de adecuar la jornada laboral de los militares, para ver si extendiendo la jornada continuada se puede evitar que se haga la comida en las unidades.