Desde que a principios de semana el líder del PSOE, Pedro Sánchez, aceptara el reto de formar Gobierno después de que el Rey le encargara esta labor, el secretario general de los socialistas no quiere cerrarse ninguna puerta. Para ello busca alianzas tanto en la izquierda-donde se encontraría Podemos- como en la derecha-con Ciudadanos-. Un camino nada fácil pero que el PSOE se ha marcado como meta con el objetivo de llegar a la Moncloa y conseguir un acuerdo a tres bandas de la mano de Pablo Iglesias y Albert Rivera que dé "una estabilidad económica al futuro Gobierno". Algo que a tenor de las declaraciones sólo parece que tiene claro Pedro Sánchez, ya que tanto el líder de Podemos como el de Ciudadanos se han encargado de reconocer por activa y pasiva que una coalición entre ambos "es imposible".
Si se analizan por separado los programas electorales con los que PSOE, Podemos y Ciudadanos concurrieron a las elecciones del pasado 20 de diciembre todo indica que este camino es muy complicado. Los principales escollos están en materia económica y laboral, y sobre todo en el derecho a decidir, que defiende Podemos y marcada como línea roja por el Comité Federal socialista antes de comenzar las negociaciones. En materia social los puntos de unión se aproximan más entre PSOE y Podemos y se alejan de Ciudadanos en temas como la inmigración o la igualdad entre hombres y mujeres. De esta forma, a simple vista sólo existen dos puntos en los que podrían coincidir: la voluntad del "cambio" y la posibilidad de regeneración política a la que tanto apela Pedro Sánchez.
A simple vista sólo existen dos puntos que los une: la voluntad del "cambio" y la posibilidad de regeneración política a la que tanto apela Sánchez
En medio de esta difícil situación Vozpopuli analiza los puntos de coincidencia y desencuentro, según los programas electorales de PSOE, Podemos y Ciudadanos.
¿En qué difieren el Gobierno del 'cambio'?
Tres son los puntos que no comparten los socialistas, Ciudadanos y Podemos y ello se observan en su programa electoral en materia económica, social y en el llamado conflicto territorial. Pese a estar de acuerdo en que el paro es el mayor problema que sufre España y mostrar cada uno sus recetas para intentar frenar el desempleo, cada uno utiliza una receta para intentar acabar con este lastre. De esta forma, una de las medidas estrellas del partido de Albert Rivera según su programa electoral era el contrato único, algo que desde el equipo negociador de Ciudadanos se ha apresurado a suavizar para llegar a acuerdos con los socialistas. Otras medidas de la formación naranja son la creación de un seguro individual para el despido, ayudas a las empresas que menos despidan y rebajar las cotizaciones para aquellos que contraten parados de larga duración.
El partido de Pablo Iglesias es el que más difiere del programa de Ciudadanos en este aspecto, pues quiere desincentivar las contrataciones temporales y a tiempo parcial, para favorecer los contratos indefinidos, aumentar el salario mínimo tras dos años de legislatura hasta los 800 euros y reducir progresivamente la jornada laboral hasta las 35 horas. En este punto, el PSOE propone tres tipos de contratos: indefinidos para cobertura de trabajos estables, temporal para los temporales y un tercero de formación y desincentivar la contratación laboral, eliminando las bonificaciones para dar más recursos a la formación.
En el ámbito de la reforma laboral las similitudes se acercan más entre PSOE y Podemos ya que ambos contemplan en sus programas electorales la derogación de la reforma laboral aprobada por Rajoy. Pese a que en las últimas horas, el secretario general de los socialistas ha reconocido que no ve tan fácil derogar la reforma laboral, tal y como prometía antes del 20D y ha propuesto hacerlo por partes. Por su parte, el líder de Ciudadanos no rechaza los cambios introducidos por el PP y pretende seguir con ellos como establecer una mayor flexibilidad. Podemos y Ciudadanos quieren reducir los impuestos, pero desde el PSOE no se marcó como prioridad la bajada de los impuestos. En las últimas horas este punto también ha sido matizado por el equipo negociador de C's que ahora se muestra favorable a no aumentarlos "a los que cumplen".
En el tema de la deuda también las diferencias son abismales. Mientras que Podemos quiere derogar el artículo 135 que fija un límite de gasto e impulsar una auditoria de la deuda soberana para habría renegociar y estructurar con los acreedores. PSOE y Ciudadanos buscan cumplir con los compromisos presupuestarios y sólo buscan pedir más tiempo para poder cumplir con el objetivo de déficit.
Podemos es proclive a que Cataluña tiene derecho a celebrar un referéndum de autodeterminación, apostando por un estado plurinacional
Órdago independentista
Otro gran escollo a un posible entendimiento entre las tres formaciones toca cuando se habla de Cataluña y el órdago independentista iniciado por el nuevo Gobierno encabezado por Puigdemont. Mientras que Podemos es proclive a que Cataluña tiene derecho a celebrar un referéndum de autodeterminación, apostando por un estado plurinacional, el PSOE mantiene su contundencia contra el proceso soberanista y se limita a una reforma constitucional que redefina a España como estado federal.
Por último Ciudadanos sólo apuesta por mantener la unidad de España para frenar el independentismo en Cataluña. En este aspecto, la formación de Albert Rivera rechaza cualquier pacto con Podemos ya que en su hoja de ruta Pablo Iglesias defiende el derecho a decidir.
En materia social, PSOE y Podemos tienen más similitudes que con Ciudadanos, sobre todo en tres puntos. En Educación, PSOE y Podemos quieren acabar con la Lomce, C's se limita a reclamar un gran pacto por la educación y está de acuerdo con Iglesias y Sánchez en acabar con la religión en las aulas. En la lucha contra la violencia de género, Podemos y PSOE tienen una clara sintonía, mientras que Ciudadanos se desmarcó con la propuesta de equiparar la violencia contra las mujeres con la violencia contra los hombres. Por último, en tema de inmigración las propuestas de Sánchez e Iglesias son más afines que las de Rivera. Y en el terreno sanitario también ha reculado y apuesta ahora por una sanidad pública y universal con un discurso muy parecido al de los socialistas.
Puntos en los que coincidirían
Pero no todo son diferencias entre estas tres fuerzas políticas y hay varios puntos en los que pueden llegar a coincidir de cara al llamado Gobierno de 'cambio' que desea encabezar Pedro Sánchez: la llamada regeneración democrática y la lucha contra la corrupción son dos ejemplos de ello. Tras los innumerables casos de corrupción que se han producido en estos años, las tres formaciones se han marcado como prioridad acabar con esta lacra. Aunque coinciden en las líneas generales, cada uno plantea un camino para acabar con ella. De esta forma, el partido de Pedro Sánchez plantea modificar la Ley de Transparencia, implantar sistemas de control interno a las empresas y fundaciones públicas, crear una oficina antifraude, dar más transparencia a las donaciones y obligar a los partidos a responsabilizarse por los casos de corrupción de sus miembros -algo que también contempla Ciudadanos-. La formación naranja propone un refuerzo por parte de la Fiscalía Anticorrupción e introducir medidas que garanticen su independencia.
En su programa hay otras dos medidas claves como son proteger a los denunciantes de los casos de corrupción y dejar fuera de las listas lectorales a los imputados. Por su parte, el partido morado aboga por un Plan Nacional contra la Corrupción y para la Transparencia Institucional coordinado por un organismo independiente. Va más allá que Ciudadanos y PSOE y propone restringir el endeudamiento bancario de las formaciones en caso de corrupción.
En cuanto a la regeneración democrática los partidos emergentes van de la mano. Tanto Podemos como Ciudadanos piden acabar con las puertas giratorias, algo que resultaría más peliagudo para los socialistas ya que lleva más años en la historia de la política en España. No obstante las tres formaciones están de acuerdo en acabar "con los privilegios " de la clase política, entre los que se encuentran la necesidad de regular los aforamientos parlamentarios.
Los partidos emergentes coinciden en las propuestas de regeneración democrática como acabar con las puertas giratorias
La necesidad de reformar la ley electoral es otro punto con el que acercan posturas Ciudadanos y Podemos ya que el actual perjudica a los partidos nuevos. Mientras que el partido de Rivera quiere que la mitad de los diputados se asignen a circunscripciones de elección unipersonal, Podemos plantea establecer "la circunscripción autonómica como única base territorial para la asignación de diputados". Por su parte, el PSOE sólo se compromete a hacer los cambios necesarios en la Constitución para lograr esta máxima.
Por último, en cuanto a la elección de los miembros del Constitucional, los tres partidos abogan por establecer cambios. Por su parte, el PSOE quiere que la designación de los miembros sea exclusiva de las Cortes; una mitad nombrados por el Congreso de los Diputados y la otra mitad por el Senado, dónde se incluirán las propuestas de las Comunidades Autónomas. Podemos pide elaborar una primera lista de candidatos basados en los méritos y un sistema de descartes hasta llegar a los magistrados que menos rechazo generen. Ciudadanos aboga por que sean los propios jueces los que elijan a sus representantes en el Órgano, según meritos pero sin detallar el método empleado.
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