Inspectores de Hacienda denuncian que están siendo objeto de una "opa hostil de Illa" para reclutarles en Cataluña. Es el sentir del colectivo, que celebra este jueves y viernes el XXXIV Congreso de la Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE) en Córdoba, y que está siendo un clamor contra el cupo catalán que han pactado PSOE y ERC a cambio de la investidura de Salvador Illa. Esta cita anual del sindicato que reúne a buena parte de los inspectores nunca abandona la institucionalidad pero en ella se han vivido momentos tensos, como la bronca que el entonces director de la Agencia Tributaria (AEAT), Santiago Menéndez, echó a los inspectores en público y en privado en una tensa asamblea en Cádiz en octubre de 2013 por sus críticas a la amnistía fiscal. Pero el escenario político actual no tiene precedentes y por ello, la directora de IHE, Ana de la Herrán, ha sido muy clara en sus palabras de bienvenida: "Los principios de eficacia y coordinación del servicio público extrañamente están en entredicho cuando conocemos que está encima de la mesa fragmentar, dividir y romper la unidad de la AEAT".
La preocupación que sienten los inspectores se ha visto acrecentada tras las palabras de la a directora de la AEAT, Soledad Fernández Doctor, este jueves, que ha mantenido una posición más tibia y menos clara de la que ya exhibió el 3 de abril, la única vez en la que se ha pronunciado sobre el cupo. Por una parte ha mostrado desconocimiento, por otra le ha quitado importancia, y por último, tras subrayar el papel esencial de la AEAT, se ha abierto a "cooperar".
Este úlltimo punto es especialmente sensible, cuando cunde la inquietud e incertidumbre que sienten los 4.000 funcionarios de la AEAT en Cataluña, según ha informado Vozpópuli y ha denunciado CSIF. Y cuando Illa ha declarado que va a cuadruplicar la dimensión de la Agencia Tributaria de Cataluña, lo que los inspectores sienten como "una opa hostil". De dónde si no va a sacar los funcionarios, se preguntan, mientras funcionarios de la Delegación estatal en Cataluña piden su traslado para huir del cupo.
El tema de este congreso es Hacia una Administración Tributaria más eficiente y como tal se han programado mesas y debates sobre la Inteligencia Artificial, la digitalización y las respuestas a estos problemas que se han dado en otros países, pero la situación de emergencia manda y este viernes se va a celebrar un debate sobre "Los modelos descentralizados en el ámbito de la financiación territorial y su impacto en la eficiencia de las Administraciones tributarias" en el que entre otros participan Ángel de la Fuente, director ejecutivo de Fedea; Ignacio Zubiri, catedrático de la Universidad del País Vasco, y José María Peláez, vocal de la Asociación de IHE, y que modera el inspector Francisco de la Torre Díaz, en el que se prevén aportaciones de máxima actualidad. También se espera la publicación del tradicional documento que elabora la asociación cada año, que versará sobre el cupo.
Este jueves ha participado brevemente en la inauguración la directora de la AEAT, que el año pasado no acudió al congreso de IHE, la primera vez en la historia que un director de la AEAT no lo hacía, cuando los inspectores se manifestaban muy preocupados con los pactos de investidura de Pedro Sánchez con ERC y Junts.
Las palabras de la directora
Fernández Doctor está en el ojo del huracán por el rechazo de IHE al cupo catalán y la inquietud e incertidumbre que sienten los 4.000 funcionarios de la AEAT en Cataluña, a la que no ha dado respuesta ni explicación alguna. Fernández Doctor tiene escasa actividad pública, que viene menguando, y sólo se había pronunciado sobre el cupo catalán el pasado 3 de abril, en la rueda de prensa de la Campaña de la Renta, preguntada por los medios, cuando dijo: "Los experimentos, con prudencia".
Estas palabras, cuando este plan ya no era descartado por el Gobierno pero sólo en una versión de consorcio, light, fueron tibias para algunos inspectores, según pudo constatar este periódico. Pues bien, este jueves en Córdoba la directora de la AEAT ha hablado unos pocos minutos de este asunto al final de su intervención y ha sido menos clara y crítica, cuando el acuerdo ya es un hecho.
Por una parte, ha planteado que esto puede no llegar a hacerse: "A todos nos gustaría saber cómo va a evolucionar este asunto", al que se ha referido como "noticias en prensa", que "debe depender de muchos factores", y ha pedido "tranquilidad". Ha hecho referencia a que ya se conoce el grupo de expertos designado para proceder a desmantelar la AEAT, cuyos componentes le parecen un "equipo de trabajo bastante equilibrado", que "enviarán algunas propuestas".
Y sólo entonces ha esbozado una reivindicación de la Agencia Estatal: "Comparto lo que vienen diciendo expertos de distintas ideologías sobre el papel esencial de la AEAT que debe seguir prestando", pero a continuación ha añadido que "debe ser compatible con la cooperación, corresponsabilidad y lealtad institucional con distintos niveles de la administración tributaria". Al final ha insistido en que "ha costado 33 años construir una organización sólida y eficiente", pero sin llevar esta reflexión más allá.
Fernández Doctor no ha querido responder a los medios sobre este asunto a su salida y se ha remitido a sus palabras.
