Hace unas pocas semanas, Antoine Griezmann, jugador del Atlético de Madrid, dio la sorpresa al hacerse público que esta temporada dejará de llevar deportivas Puma. Para sustituirlas, se calzará unas botas Kipsta, la marca especializada en fútbol dentro de Decathlon, según adelantó el diario especializado Relevo. La noticia ha causado furor entre los aficionados de los deportes, no solo porque supone terminar un 'matrimonio' entre el francés y Puma que ha durado 14 años, sino que será el primer jugador en llevar oficialmente unas zapatillas de Decathlon, especialmente exitoso para la marca si se tiene en cuenta el nivel de repercusión de un jugador como Griezmann.
El francés llevará, en principio, unas zapatillas Kipsta CLR. Pese a que son una de las mejores propuestas de Decathlon, su precio queda muy lejos de las 'inalcanzables' zapatillas de Nike, Adidas o Puma, que rondan los 250 euros: por el módico precio de 65 euros, cualquiera podrá llevar las mismas zapatillas que usa la estrella francesa en sus partidos con el Atlético de Madrid.
Supone además un gran hito para la cadena francesa de productos deportivos, que lleva muchos años trabajando en quitarse la etiqueta de calidad 'low cost' metiendo cabeza en el más alto nivel de los deportes. Hace poco firmó su otro gran logro en el fútbol: conseguir que sus balones Kipsta sean los oficiales de la Europa League y de la Conference League. De esta manera, culmina su ascenso meteórico, tras muchas décadas siendo sólo la marca de las zapatillas "para todos los públicos".
La estrategia y el objetivo de Decathlon desde su creación era muy clara: ofrecer productos de una amplísima variedad de deportes, a precios asequibles. A diferencia de otras multinacionales, que siempre han apostado por centrarse en el rendimiento profesional, en Decathlon estaban orientados a aquellos que se estén iniciando en dichos deportes. Pero desde hace un tiempo parece que los franceses están queriendo superar la fase de 'principiantes' y quieren demostrar que también pueden conquistar las altas esferas, sin renunciar a sus precios para todos los públicos.
Pese a que están presentes en cada vez más deportes a nivel profesional, y tienen acuerdos comerciales cada vez más relevantes, el fichaje de Griezmann sería sin duda el más importante de Decathlon hasta la fecha en camino de estar presentes en las mejores competiciones del mundo a nivel profesional.
El ascenso meteórico de Decathlon
Fundada en 1976 en Lille (Francia), y con presencia en 57 países, Decathlon ha dado en los últimos un cambio radical de imagen. Este contrato con Griezmann no es, en absoluto, el primer avance de Decathlon en el alto nivel. Su primer hito fue poner su nombre al estadio del Lille, su lugar de nacimiento, hasta 2027. Hasta entonces se llamará Decathlon Arena.
Además, tienen un acuerdo firmado con el tenista francés Gaël Monfils, a la vez que tienen más presencia en el mundo profesional del pádel. De hecho, avanzando en esta estrategia, en febrero de este año la firma deportiva y la Federación Madrileña de Pádel firmaron un acuerdo de colaboración para impulsar el pádel profesional en la capital española.
En la conquista de otros deportes, cabe destacar que este mismo jueves se hacía oficial que Kipsta será la nueva proveedora oficial de balones para la Copa Intercontinental de fútbol sala los próximos cuatro años.
Este ascenso hacia la élite de Decathlon llega en un buen momento empresarial para ellos. El grupo registró un beneficio neto de 123 millones de euros en 2023 en España, lo que supone un crecimiento del 24%. En concreto, la multinacional ha cerrado su ejercicio fiscal con una facturación de 2.127 millones de euros (con IVA) en España, lo que supone un ligero aumento del 1% respecto a 2022, aportando el 12% de la facturación global de la compañía.
