Paula Babot (Málaga, 1991) sabe que hay que hablar alto y claro de los problemas. De hecho, ha logrado que su primera novela, 'Mejor cerca del agua', genere una conversación en torno al maltrato psicológico en las relaciones afectivas. La historia de Creta, una mujer que intenta escapar del ciclo de abuso mudándose a Londres, aborda el camino de autodescubrimiento y los desafíos de desatarse de vínculos que al mismo tiempo hieren y atrapan. En esta entrevista, Paula Babot comparte sus motivaciones, experiencias personales y proceso creativo detrás de una obra que pretende ser un reflejo de una realidad compleja y en muchas ocasiones, silenciosa.
Babot confiesa que la necesidad de escribir sobre el maltrato psicológico surgió de una motivación personal de "visibilizar esas realidades que no siempre son fáciles de reconocer". La autora destaca cómo muchas veces la violencia psicológica se oculta bajo capas de amor y promesas, haciéndola aún más difícil de identificar. "Es complicado reconocer y salir de una relación así", comenta, explicando que uno de los principales objetivos de su novela es mostrar al lector la ambigüedad y las contradicciones que enfrenta la víctima.
La novela, a través de Creta, permite ver la dificultad que implica salir de un entorno de abuso: una historia en la que el dolor y la vulnerabilidad coexisten, haciendo que el lector sea testigo de cómo una persona puede quedar atrapada en una espiral emocional que desgasta su identidad y autoestima.
Londres: un lugar de refugio y redescubrimiento
El cambio de entorno de la protagonista es una de las decisiones narrativas más importantes en 'Mejor cerca del agua'. La elección de Londres no es casual; según Babot, la ciudad representa un espacio de "anonimato y oportunidades para empezar de cero". Sin embargo, Londres es también un lugar significativo a nivel personal, pues la autora vivió allí durante dos años, una experiencia que dejó una huella en su vida y en su escritura.
Para Creta, Londres es a la vez una metáfora de distanciamiento y un escenario para la introspección. "Allí puedes perderte y, a la vez, reencontrarte", señala Babot, reflejando en su protagonista la necesidad de desconectarse físicamente del pasado para iniciar un proceso de sanación. Este cambio de entorno se convierte en un recurso narrativo que no sólo profundiza en la huida de una relación tóxica, sino también en la necesidad de encontrar un nuevo punto de partida para redescubrirse.
Personajes complejos, Creta y Milo
Babot admite que dar vida a personajes como Creta y Milo no fue tarea fácil. Al abordar la dinámica del maltrato psicológico, fue consciente de que el riesgo de caer en clichés o en la tendencia de culpabilizar a la víctima era alto. "Existen contradicciones en Creta, que ama a pesar de todo, y en Milo, quien regresa a su vida porque, de alguna manera, se complementan", explica. La autora describe el maltrato psicológico como una realidad de límites difusos que no se puede medir en términos absolutos, algo que intentó plasmar en la compleja relación entre los personajes.
La figura de Milo encarna al manipulador que sabe cómo regresar a la vida de Creta, alimentando un ciclo de dependencia emocional. Babot explica que la construcción de Milo como personaje fue un ejercicio de inmersión en el perfil del abusador, que actúa de manera calculada para mantener una dinámica en la que necesita de la víctima para sostener su propia identidad.
La autora enfatiza que 'Mejor cerca del agua' es una exploración sobre cómo la violencia psicológica puede manifestarse de forma progresiva y silenciosa. "La historia aborda la sutileza del maltrato psicológico, cómo la violencia puede ser silenciosa y manifestarse de manera progresiva", detalla Babot. La novela muestra cómo esta clase de maltrato se convierte en un proceso gradual que puede pasar desapercibido incluso para la persona que lo vive.
En esta narrativa, la protagonista se enfrenta a una pérdida de identidad marcada por obsesiones y dependencias que reflejan la realidad de muchas personas atrapadas en relaciones de abuso. "Es fácil perder de vista quién es uno realmente", comenta Babot, quien espera que los lectores puedan ver en la historia de Creta un reflejo de situaciones que, a menudo, son difíciles de reconocer en la vida real.
El simbolismo del agua
El título 'Mejor cerca del agua' no solo es un recurso literario, sino que tiene un profundo significado en la historia y en la vida de la autora. "El agua representa la purificación, la transformación, la vida", explica Babot, quien añade que siempre ha buscado vivir cerca de cuerpos de agua, ya sea un lago, un río o el mar. Para Creta, el agua es una constante en su vida, una fuente de tranquilidad y de conexión consigo misma que le ayuda en su proceso de sanación.
El agua es, en muchos sentidos, una metáfora del viaje de autodescubrimiento de Creta. Al igual que el agua, su protagonista fluye y cambia, enfrentando etapas de turbulencias y calma, de destrucción y renacimiento. Babot utiliza este recurso para transmitir cómo el proceso de sanación requiere de tiempo y, sobre todo, de una conexión con uno mismo.
Uno de los grandes desafíos que enfrentó Babot al escribir su novela fue evitar los clichés comunes en las historias sobre relaciones abusivas. "Los clichés muchas veces romantizan este tipo de relaciones y son muy dañinos", afirma. Según la autora, idealizar la figura del abusador como alguien que puede redimirse con el amor de la víctima es una visión que perpetúa el daño en la literatura y en la vida real. "La realidad es que no todos los finales son felices, y menos aún en el caso de las relaciones de maltrato", destaca.
La novela, en lugar de ofrecer una conclusión romántica, presenta un final realista que refleja las dificultades y el dolor de una relación de abuso. Babot espera que su enfoque alejado de los clichés permita a los lectores comprender la seriedad de estas situaciones sin idealizarlas ni convertirlas en fantasías de redención.
El ciclo de abuso y la dificultad de romperlo
Uno de los temas más profundos de la novela es la dificultad para romper con el ciclo de abuso. Babot señala que, para muchas personas, reconocer la realidad de la situación no es suficiente para salir de ella. "La relación se convierte en una montaña rusa, y en los momentos altos hay cariño o arrepentimiento, promesas", explica. Esta dependencia emocional, reforzada por el miedo a estar solo o a perder al abusador, crea una adicción que resulta extremadamente difícil de romper.
Babot también reconoce que el proceso de abandonar una relación abusiva no es sencillo ni rápido. A través de Creta, la novela muestra cómo la esperanza de que "todo va a cambiar" puede convertirse en un obstáculo, ya que muchas personas se aferran a esta idea a pesar del dolor y el sufrimiento que la relación les ocasiona. Al construir los personajes y la trama de 'Mejor cerca del agua', Babot se apoyó en su propia experiencia y en conversaciones con psicólogos y personas que han pasado por situaciones similares. "Yo misma experimenté una relación de maltrato psicológico que tardé mucho tiempo en reconocer", comparte.