El tenista Rafa Nadal ha anunciado este viernes que no jugará en el Abierto de Australia, primer gran torneo de la temporada, al no recuperarse de la infección gastrointestinal que le ha impedido continuar con su proceso de recuperación tras la lesión de rodilla que sufrió este verano.
"Mi rodilla está bastante mejor y el proceso de recuperación ha ido según lo previsto por los médicos, pero este proceso vírico ha hecho que no pudiera entrenar esta última semana y en los próximos días y, por tanto, muy a mi pesar, no podré reaparecer en el momento que habíamos previsto", ha indicado el deportista.
El balear tenía previsto volver a las pistas en Abu Dhabi, durante el Mubadala World Tennis Championship. Así, parecía poner fin a una baja de seis meses por su lesión de rodilla, que le apartó de la competición tras perder en Wimbledon contra el checo Lukas Rosol.
Sin embargo, la infección gastrointestinal le hizo renunciar al torneo en los Emiratos Árabes y las dudas sobre su retorno en la siguiente cita, en Doha, comenzaron a crecer. Finalmente, el exnúmero 1 del ranking mundial se perderá una nueva cita tras renunciar a los Juegos Olímpicos y perderse el US Open y la Copa de Maestros.
Ahora, la culpa la tiene una infección que ha provocado que los médicos le hayan recomendado reposo deportivo a partir de hoy durante los próximos siete días y tratamiento sintomático con control clínico y ecográfico en los próximos 4-5 días, lo que la haría llegar sin preparación al 'grande', un riesgo demasiado alto.
"Creo que tal y como dicen los médicos y mi equipo, lo más prudente es hacer las cosas bien y este virus ha hecho retrasar todos mis planes de reaparecer en estos días. Mi reaparición tendrá que esperar hasta el torneo de Acapulco si bien no descartaría la posibilidad de reaparecer en algún torneo antes", ha asegurado Nadal al respecto, que esta temporada tenía como objetivo retornar a la gira de tierra batida del mes de febrero.