Han pasado seis meses desde que Carlos Marín, cantante del famoso grupo Il Divo, falleciera. Fue el 19 de diciembre de 2021 cuando, tras siete días ingresado en la UCI de un hospital de Manchester, el artista perdía la vida a consecuencia de las complicaciones derivadas del coronavirus.
Días después, famosos y anónimos se despedían de él en el Tanatorio San Isidro de Madrid, donde se instaló la capilla ardiente. Allí podíamos ver a su familia y a su expareja, Geraldine Larrosa, cantante conocida como Innocence, quien se mostraba rota de dolor.
Ahora, apenas medio años, el artista de Il Divo vuelve a la actualidad, aunque esta vez por los enfrentamientos entre sus seres queridos por la herencia del cantante.
Así lo ha desvelado Saúl Ortiz en el diario ABC, donde recoge el testimonio de la hermana de Carlos Marín, que denuncia el acoso que sufre su madre por parte de Geraldine, quien en su día fue el gran amor del artista.
Los problemas por la herencia de Carlos Marín
“Jamás pensé que esta mujer intentara arruinar a mi madre como lo está haciendo”. Con estas palabras, Rosa, la hermana del cantante, acusa a Geraldine Larrosa de hostigar a su madre. Según desvela, los problemas surgieron tras la apertura del testamento. En él, el cantante dejaba como heredera a su madre, pero legaba a su expareja una vivienda, valorada en 700.000 euros, aunque con una hipoteca de más de 300.000 euros.
Ahora, según ha desvelado el abogado de la familia del artista al citado diario, la intención de la artista es heredar esta propiedad sin tener que pagar nada: “Como en el documento no se especifica, la beneficiaria quiere que la casa se entregue libre de cargas, que sea la madre de él quien pague los atrasos y el monto total”.
Ante esta situación, Rosa Marín ha querido denunciar públicamente el acoso al que supuestamente Geraldine Larrosa está sometiendo a su madre: “Ella llama continuamente a mi madre por teléfono y le ha provocado ya varias crisis de ansiedad, no es justo. Tal es el volumen de llamadas que solicité una orden de alejamiento que no se concedió porque la tenía que pedir mi madre”.
Además, en sus declaraciones al medio, la hermana del barítono carga contra la cantante: “Después de todo lo que ha hecho mi padre por ella… A esa mujer solo le mueve el dinero, cada sonrisa entregada a mi hermano la pagó con creces en efectivo”.
La batalla por los derechos de imagen
Otro de los conflictos entre la cantante y la familia de Carlos Marín radica en los derechos de imagen. Al parecer, Innocence espera poder utilizar la imagen del barítono para la explotación artística tratando de demostrar que ella ejercía como directora creativa.
Según ha desvelado Alberto Marín, el abogado de la familia al diario ABC: “Los derechos corresponden a su madre, que es la heredera. El único director creativo o artístico era Carlos y eso es incuestionable. Le hemos dado mucho material, le hemos cedido lo relativo a su carrera, y eso se traduce en mucho dinero”.
La relación entre Carlos Marín e Innocence
Fue en 1994 cuando, trabajando en el musical ‘Los Miserables’, Carlos Marín y Geraldine Larrosa se conocieron y se enamoraron. Doce años después, en 2006, la pareja se casaba en una romántica boda en Disneylandia rodeados de sus familiares y amigos más íntimos.
En 2009, la pareja anunciaba su separación oficial, aunque siguieron manteniendo una cercana relación de amistad. Después de la muerte del cantante de Il Divo, Geraldine Larrosa aseguró que seguían enamorados y que tenían planes para volver a casarse.