María Patiño, de 50 años, es uno de los rostros más conocidos de Mediaset. Es colaboradora de 'Sálvame' y presentadora de 'Socialité', además de sustituir a Jorge Javier Vázquez en el 'Deluxe' los sábados.
A pesar de su exposición a diario en la televisión, poco se sabe de su vida íntima. De su hijo nunca ha hablado, es el gran desconocido, y de su marido, Ricardo Rodríguez, tampoco es muy dada a hablar.
Sin embargo, este miércoles nos ha sorprendido apareciendo en la portada de la revista 'Lecturas', donde le ha concedido una entrevista en exclusiva a su compañero y amigo, el reportero Omar Suárez.
Patiño ha dejado al descubierto su lado más íntimo y sentimental, desvelando algunos de los aspectos más desconocidos de su vida privada: desde la bulimia que padeció al varapalo que supuso la muerte de sus padres.
“Mis grandes secretos no se saben. Se cuentan cosas que no han pasado y todavía nadie me ha preguntado por cosas que sí han ocurrido”, ha señalado en la revista.
María Patiño habla de la bulimia: "Era una manera de autodestruirme"
La periodista gallega, criada en Sevilla, se ha abierto en canal y ha hablado abiertamente de la bulimia nerviosa que padeció con 23 años y que ha marcado su vida. Una enfermedad de la que ya había hablado anteriormente pero sobre la que profundizó más en esta ocasión. Justo el pasado 30 de noviembre se celebró el Día de la lucha contra los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA).
Patiño logró salir de la bulimia tras ver amenaza su salud y todo lo importante que tenía en su vida aunque le costó mucho. "Es muy difícil salir”, ha desvelado, “Yo hablo de mi experiencia, porque me resultó difícil salir después de muchos intentos”.
Es una manera de autodestruirme y castigarme
La presentadora se recuperó gracias a la ayuda de la psicóloga especialista Carmen del Río, que realizó una unidad de tratamiento experimental en la Facultad de Psicología de Sevilla a la que María se presentó voluntariamente.
“Al principio me planteaba qué hacía allí, porque veía a gente peor que yo, pero volví y volví. Detrás de cualquier adicción hay un problema que hay que atajar”, ha explicado.
La periodista ha indicado que este tipo de trastornos alimenticios están muy relacionados con la ansiedad, como es su caso, y que la enfermedad era una “manera de autodestruirme y castigarme”.
“Cuando te perdonas y analizas tu situación y tus carencias, y potencias lo positivo que ni veías, te vas recuperando”, ha sentenciado.
Patiño: "Es una adicción de por vida... Yo nunca podría darme una comilona ni puedo saltarme una comida"
Desde que este momento, ha asegurado que aunque "es una adicción de por vida" nunca ha tenido una recaída gracias a que hay detrás un gran trabajo personal por luchar contra la bulimia.
Aún así, ha reconocido estar todavía condicionada, y su vida tiene rutinas muy bien asentadas: “Yo nunca podría darme una comilona, porque podría pasarme factura”, ha señalado para después añadir: “Llevo una vida saludable, pero no puedo saltarme una comida”.
La periodista asegura que sigue una dieta saludable, pero evita a toda costa los alimentos ultraprocesados para no caer en la tentación. “Cuando estaba en pleno proceso, uno de los médicos me dijo que cuando estuviera recuperada podría hacer lo que quisiera con mi cuerpo porque, hasta entonces, solo iban a ser parches falsos”, ha indicado.
Patiño ha concluido diciendo: “Está más vinculado a no quererme a mi misma que a lo físico; te crees que eres peor que los demás y que no haces feliz a nadie. Tras verme recuperada, nunca he tenido complejos de nada”.
La muerte de sus padres fue un duro revés
Para María, la vida no ha sido un camino de rosas. Empezó como reportera de calle, años en los que compartió piso con Jorge Javier Vázquez. De sus primeros años en televisión ha recordado el toque de atención que le tuvo que dar Ana Rosa Quintana: "Lo último que me importaba era cómo iba vestida o peinada. Ana Rosa me dio un toque porque me dijo que la tele era un todo”, ha declarado.
Años después se produjo el mayor varapalo emocional que sufrió la presentadora: se quedó huérfana de padre y madre en solo tres años.
En 2014 murió la madre de Patiño de forma repentina a los 66 años y tres años después perdió a su padre Antonio, el día de Reyes de 2017. Este duro revés le cambió la vida a la presentadora de ‘Socialité' para siempre.
María sigue teniéndoles muy presente en su día a día y en las fechas señaladas, siempre les rinde un homenaje, recuperando fotos de ellos o compartiendo emotivos mensajes.
De sus padres ha destacado: “De mi padre siempre he valorado la honestidad. De mi madre, la fuerza, era muy justiciera y temperamental".
En casa éramos muy diferentes y discutíamos mucho
Sin embargo, ha confesado que en su familia eran habituales las discusiones, quizás por eso es tan pasional cuando discute y se mueve tan bien en las polémicas que surgen cada día en directo en 'Sálvame'.
“En casa éramos muy diferentes y discutíamos mucho. Mi madre era de una ideología política, mi padre de otra. Mi padre era militar y yo tengo un hermano que es objetor de conciencia, uno creyente y otro ateo. Si nos ves, te asustarías, pero después seguíamos cenando”, ha indicado.
A pesar de ello aclara que, pese a las diferencias, la unión con sus padres era de lo más especial.
La presentadora está muy enamorada de su marido
En la entrevista también ha hablado de su marido Ricardo Rodríguez, con el que la presentadora lleva 15 años de relación y dos de matrimonio. La pareja se casó con una boda sorpresa en una playa de Sri Lanka en 2019.
La colaboradora de 'Sálvame' ha asegurado que sigue sintiendo el mismo amor y pasión por el venezolano que en los comienzos de su relación. "Estoy más enamorada que el primer día y, cuando lo veo, aún me pone mucho”. Además ha confesado que su sueño es irse a vivir junto al mar.
