Alejandro Stivelberg Katz, más conocido como Alejo Stivel, ha sido declarado recientemente en concurso de acreedores por el Juzgado Mercantil 7 de Madrid. El cantante y fundador del grupo Tequila conserva las facultades de administración y disposición de su patrimonio, pero sometidas a la intervención de la administración concursal designada por el juez.
A partir de ahora, y mientras el músico y productor se mantenga en concurso de acreedores, su economía será gestionada por el abogado Juan Diz García, nombrado administrador concursal de Stivel por el juez. El administrador concursal tendrá ahora que elaborar un informe sobre las causas del concurso declarado y considerar una asignación mensual de dinero para Stivel, denominada 'derecho de alimentos', para sufragar sus gastos y, si fuera necesario, los de su familia.
Este diario no ha podido contactar con el músico para conocer las causas de su caída en concurso de acreedores, aunque sí se ha hecho llegar a su representación legal el interés de este medio por lo ocurrido.
Alejo Stivel (Argentina, 1959) formó a finales de los años setenta junto con Ariel Rot el grupo Tequila, que se disolvió en 1983 tras publicar cuatro discos. Stivel inició entonces una fecunda carrera como productor musical, produciendo un centenar de discos de artistas como Joaquín Sabina o El Canto del Loco.
En 2008, un año después de producir el espectáculo Soulería, de Pitingo, volvió a juntarse con Ariel Rot dando una gira veraniega como Tequila. En 2011 sacó un disco en solitario, de versiones, y un año después cerró su estudio de producción en Madrid, ASK. Este año Stivel tiene previsto participar en nuevos conciertos con Rot y Tequila, siendo muy esperada su presencia en el festival Músicos en la Naturaleza que se celebra en julio en Hoyos del Espino (Ávila).
Más de 2.000 personas en concurso
El pasado año se declararon en concurso de acreedores 2.237 personas en España. La aprobación en 2015 de la Ley de Segunda Oportunidad ha incrementado el número de personas que se acogen a esta medida que les permite blindarse durante el tiempo que dura el concurso de embargos y reclamaciones de acreedores.
Fuentes expertas en la materia indican que si Stivel demuestra que es deudor de buena fe, que ha hecho lo posible por cumplir con sus acreedores, el juez podría exonerarle de pagar las deudas en virtud de esa ley de segunda oportunidad.
La Ley de Segunda Oportunidad introdujo nuevos preceptos en la Ley Concursal según los cuales, una vez concluido el concurso por liquidación o por insuficiencia de la masa activa, el concursado podrá ser exonerado de pagar el pasivo no satisfecho siempre que el concurso no sea declarado culpable y que el concursado cumpla ciertos requisitos (básicamente haber actuado de buena fe durante el proceso y con sus acreedores).
