La intención de Economía y el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), actual dueño de la entidad, es subastar Catalunya Caixa en 2014. Sin embargo, dos circunstancias supeditan esta posible adjudicación. Por una parte, el interés de sus posibles compradores. De la otra, el devenir judicial de las dos demandas admitidas a trámite por la Audiencia Nacional, según ha podido saber Vozpópuli, al entender que han podido existir irregularidades en el ERE firmado por la entidad, el FROB y los sindicatos el pasado 9 de octubre.
La primera causa, que se juzgará este martes, está motivada por presunta constitución irregular de la mesa de negociación del ERE de Catalunya Caixa, con la consiguiente vulneración de derechos fundamentales, así como por haber cometido otras presuntas irregularidades, recogidas en el Estatuto de los Trabajadores. En la segunda demanda, cuya vista está señalada para el 6 de febrero de 2014, la Audiencia Nacional tendrá que decidir si admite la impugnación por nulidad del acuerdo laboral firmado por los dirigentes de la entidad catalana con cuatro sindicatos (UGT, CCOO, SEC y CSICA).
Ambas demandas han sido interpuestas por el sindicato ATRAE, que engloba los intereses de la plantilla fuera de Cataluña, la más castigada por el ERE. De hecho, toda la red y los trabajadores fuera del territorio de origen se verán afectados por este ajuste, con independencia de si estas oficinas son más rentables que otras que sobrevivirán en Cataluña, definida como zona core en el plan de reestructuración firmado con Bruselas a cambio del rescate bancario.
Los representantes de ATRAE, la segunda fuerza sindical en el territorio de expansión, y mayoritaria en Madrid y Málaga, emprendieron acciones legales al ser vetada su presencia en la mesa negociadora del ERE por UGT y la Sección Sindical de la Federación Sindicat d’Estalvi de Catalunya Sindicato de Empleados de Caja (SEC). El veto se produjo, el pasado 30 de julio, al entender tanto UGT como SEC que ATRAE no podía estar presente en el foro negociador al no haber concurrido a las elecciones sindicales de 2010 (se creó meses más tarde).
Hace menos de un mes, la Audiencia Nacional anuló el ERTE de Liberbank al fallar a favor de una situación similar a la que solicita el sindicato ATRAE, que agrupa a la plantilla fuera de Cataluña de CX
Dos meses después, el 28 de agosto pasado, ATRAE presentó ante la Audiencia Nacional una demanda de vulneración de derechos fundamentales en la negociación del ERE. Días después, a principios de septiembre, la AN admitió a trámite la demanda y fijó la fecha del juicio para este martes 10 de diciembre. Una vez firmado el ERE, ATRAE volvió a presentar una segunda demanda, esta vez a finales de octubre, solicitando la impugnación por nulidad del ERE, admitida también a trámite por la Audiencia Nacional.
En paralelo, los dirigentes de ATRAE solicitaron medidas cautelares, a principios del pasado noviembre, para que se paralizase la ejecución del ERE hasta que no se conocieran los dos fallos de la Audiencia Nacional. Sin embargo, estas medidas cautelares no pudieron ponerse en marcha ante la incomparecencia de varios de los abogados de la parte demandada en la vista que debía determinarlas.
De esta manera, el ERE de Catalunya Caixa ya ha comenzado a ejecutarse pese a que este mismo martes podría declararse nulo. No en vano, hace apenas tres semanas, la Audiencia Nacional anulaba el ERE temporal de Liberbank ante una demanda similar a la presentada por ATRAE. Entonces, la Audiencia falló contra el banco presidido por Manuel Menéndez al entender que existía vulneración de la libertad de una serie de sindicatos que no pudieron participar en la firma del acuerdo, como solicita ATRAE en el caso de Catalunya Caixa.
En el caso de que la Audiencia Nacional falle este martes contra Catalunya Caixa y el FROB, demandado en ambos casos, la entidad y su dueño tendrían la opción de recurrir al Tribunal Supremo para no paralizar la marcha del proceso. Este posible recurso paralizaría también la vista por la segunda demanda, pero enquistaría la situación hasta la resolución del Supremo, convirtiéndose así en un problema que heredaría el futuro comprador.
El ERE acordado en Catalunya Caixa afecta a un total de 2.153 trabajadores, de los que más de 1.700 afectados y 350 oficinas corresponden a la red de la entidad fuera de Cataluña. Pese a la judicialización del proceso, el ERE ya ha comenzado a ejecutarse. La intención del FROB, encargado de realizar el ajuste, es cerrar este ejercicio con el cierre de 140 oficinas y la salida de 800 trabajadores, para completar la reestructuración a lo largo de 2014.