Actividades de Construcción y Servicios pretende volver a hacer honor a la fama de "visionario" de su presidente, Florentino Pérez, ponen de relieve diferentes fuentes del mercado de las infraestructuras. El equipo del consejero delegado Juan Santamaría se ha fijado el objetivo de asumir y consolidar un rol de liderazgo internacional en el incipiente segmento de los aerotaxis en medio de crecientes dudas en agentes del sector. La ausencia todavía de un marco legal claro en Europa y la falta de apoyo financiero público al respecto han acabado provocando insolvencias y cambios accionariales forzosos en las últimas semanas que no parece que vayan a amedrentar a la gigante española de infraestructuras.
La compañía cotizada en el Ibex 35 apunta a expandir y consolidar su apuesta por el mercado internacional de los vertipuertos -las potenciales terminales de los llamados aerotaxis- tras hacerse con la adjudicación de las obras para la reforma del helipuerto de Manhattan y su posterior gestión renovable hasta 2045. Una "instalación clave para el presente y el futuro de la movilidad aérea sostenible", en palabras del grupo promotor, que asumirá las operaciones este 2025 para dar cabida a taxis aéreos que conecten el centro de Nueva York con el aeropuerto internacional JFK durante el próximo lustro.
En el horizonte de la constructora española aparece también el primer "vertipuerto comercial permanente del mundo" en Dubái, que comenzó sus obras hace apenas unas semanas. La meta pasa por el estreno del servicio de aerotaxis entre finales de 2025 y principios de 2026 de la mano de la desarrolladora americana de taxis aéreos Joby Aviation, con un contrato de exclusividad en la ciudad emirato hasta 2030. El transporte tendría capacidad para cuatro pasajeros además del piloto y podría alcanzar una velocidad superior a los 300 kilómetros por hora.
ACS participa de estos proyectos a través de su participación mayoritaria en la firma londinense especializada en vertipuertos Skyports, que ha levantado más de 150 millones de dólares en inversiones el último año entre empresas como la española y la francesa ADP. Esta última ya abrió en 2022 de la mano de Skyports el primer banco de pruebas europeo de vertipuertos en París, una iniciativa en la que se han ido implicando diferentes compañías, como la desarrolladora de aerotaxis Eve Air Mobility, de la brasileña Embraer.
En Eve Air Mobility entró accionarialmente en 2022 la española Acciona tras una inversión de 27 millones de euros, y con ella mantienen en estudio proyectos a nivel internacional otras empresas españolas, como Ferrovial y Globalvia. De origen brasileño y cotizada en EEUU, Eve apunta a empezar a comercializar un prototipo de aerotaxi a nivel internacional en 2026. Hasta el momento, ha dado cuenta de una inversión total -entre 2022 y 2023- de unos 100 millones de dólares que podrían verse aumentados en los próximos años con el apoyo de un crédito de 90 millones del Gobierno brasileño y de un préstamo de 50 millones de Citibank.
ACS apuesta de lleno a los vertipuertos con eje en Dubái y EEUU mientras Ferrovial frena
La propia Ferrovial presentó ya en 2021 una iniciativa todavía en estudio dentro del Gobierno de España, que pasa por una red "completamente sostenible" de 20 vertipuertos en el país con un presupuesto de 200 millones sujeto a financiación con los fondos europeos Next Generation y en la que se cimentan parte de las expectativas del sector nacional, como han recogido desde la patronal Seopan. La compañía que preside Rafael del Pino llegó a invertir ya en 2021 unos 15 millones de dólares en la toma de una participación en la alemana Lilium Air Mobility, con la que había alcanzado antes un acuerdo marco para la puesta en marcha de una red de más de 10 vertipuertos en Estados Unidos.
La concesionaria española de la familia Del Pino abrió una filial para canalizar más alianzas en este sentido, Ferrovial Vertipuertos. Se la pretendía potenciar, de hecho, con la entrada de un socio inversor dentro de un proceso que se ha acabado paralizando,como avanzó El Economista, a la par del reciente cambio de manos en Lillium -forzado por la falta de financiación desde el Gobierno alemán- y la incertidumbre regulatoria en Europa. Fuentes cercanas a otras de las empresas españolas con intereses en el segmento transmiten en este sentido cautela al respecto del fenómeno de los aerotaxis, "un mercado todavía en gestación que progresa muy lentamente y no sabemos cómo acabará".
ACS decidió asumir ya este año una inversión superior a los 100 millones de euros para la toma de Skyports que forma parte de una apuesta estructural y de fondo para el grupo que preside Florentino Pérez
Por lo pronto, ACS decidió asumir ya en 2024 una inversión superior a los 100 millones de euros para la toma de Skyports que forma parte de una apuesta estructural y de fondo para el grupo que preside Florentino Pérez. A través de Skyports, la empresa madrileña ha pasado a liderar también el proyecto London Heliport así como una red de vertipuertos en Dubái que se alistaría para 2026 y que se enmarca dentro de la Estrategia de Transporte Autónomo de la ciudad emirato para que el 25% de su tráfico sea sin conductor para 2030.
Tal y como detalló en su momento su consejero delegado, ACS aunará su apuesta por los taxis aéreos en su flamante filial Infra Tech & Mobility. Bajo su brazo también gestionará proyectos en materia de coche autónomo canalizados por la firma de Silicon Valley Glydways, en la que la constructora española entró a finales de 2023 como lo harían luego la automovilística japonesa Suzuki y el cofundador de OpenAI, el americano Sam Altman.
Al igual que con los taxis aéreos, la posición sobre los coches autónomos del flamante Gobierno de Donald Trump junto al impulsor de Tesla, Elon Musk, promete alegrías en ese país para la compañía que controla el también presidente del Real Madrid. Ya en 2024, ACS se hizo con un proyecto pionero de prueba de coche autónomo en el entorno del aeropuerto de Atlanta -el más grande del mundo- de la mano del Gobierno republicano del estado de Georgia, que también adjudicó a una alianza suya con Acciona el mega contrato de autopistas al que optaba el pasado semestre Ferrovial.