Goldman Sachs y Oaktree tienen previsto presentar el próximo miércoles día 28 de febrero ofertas vinculantes por una cartera de suelo propiedad de Iberdrola Inmobiliaria. La filial de la multinacional energética ha iniciado así uno de sus mayores procesos de venta de activos de los últimos años coincidiendo con la recuperación del sector y el voraz apetito mostrado por fondos internacionales por terrenos en el mercado español.
Los dos bancos de inversión estadounidenses se han interesado por la que es considerada en el sector inmobiliario español como una muy buena cartera de suelo, lista para edificar más de un millar de viviendas en localizaciones situadas en Madrid, Málaga y Granada (más de la mitad), y también en Navarra, Salamanca, Murcia, Cantabria y Valencia. La valoración de los terrenos ronda los 100 millones de euros, de acuerdo a fuentes conocedoras de las negociaciones.
Las fuentes consultadas advierten que si las ofertas no fueran satisfactorias se abriría la puerta a otros fondos de inversión "que hacen cola por participar en la operación". En total, los terrenos de la filial del grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán puestos a la venta ocupan una superficie edificable de 126.000 metros cuadrados.
En 2016 el valor de los activos de Iberdrola Inmobiliaria superaba los 1.700 millones
Iberdrola Inmobiliaria, con la que contactó ayer Vozpópuli, niega la existencia de esta operación. Dos fuentes distintas consultadas por este diario aseguran no obstante que también Banco Sabadell participa en el proceso. De acuerdo a estas fuentes, Solvia Desarrollos Inmobiliarios, filial de la entidad financiera, creará junto con el comprador de los terrenos una sociedad conjunta para desarrollar las viviendas, mientras que Iberdrola Inmobiliaria mantendrá una participación menor en la nueva empresa.
El grupo energético español creó Iberdrola Inmobiliaria en el año 1991. La empresa ha conseguido sobrevivir a la mayor crisis en la historia del sector inmobiliario español -la sufrida tras el estallido de la burbuja a finales de 2007- y se presenta ahora con una cartera de activos valorados en más de 1.700 millones de euros y una gestión muy respetada en el sector.
Iberdrola Inmobiliaria acometió justo antes del inicio de la crisis económica y financiera elevadas inversiones en proyectos en España, México, y Bulgaria. En 2015 Iberdrola inyectó en su filial inmobiliaria 616,7 millones de euros a través de una ampliación de 154,2 millones, y el resto como prima de emisión. En 2016 Iberdrola Inmobiliaria ingresó 63,8 millones de euros y ganó 3,2 millones de euros, según las últimas cuentas depositadas en Registro Mercantil a las que este diario ha accedido a través de Insight View.
De acuerdo a las mismas cuentas, el consejo de administración de Iberdrola Inmobiliaria, presidido por José Sainz Armada, dirigido por Emilio Sánchez Castellano, y en el que participa como consejero Ignacio López del Hierro, no recibió remuneración en 2016, pero sí dietas por importe de 196.000 euros (206.000 en 2015). El consejero delegado y otros cuatro directivos ganaron 1,25 millones.