El ministro de Industria y Energía, José Manuel Soria, se ha convertido en un ferviente defensor de las compañías petroleras. Y no sólo por ser el principal artífice de las prospecciones petrolíferas de Repsol en su tierra, las islas Canarias, sino porque, a poco que puede, se lanza de predicar que hay competencia real en precios entre las gasolineras.
Este mismo martes volvió a defender esa tesis: “hoy, fundamentalmente en las grandes ciudades, es posible ver auténtica competencia en precios de unas estaciones de servicio a otras”, ha dicho el ministro, el mismo día en el que la CNMC ha confirmado, un mes más, que los márgenes de las compañías petroleras siguen subiendo pese a las reiteradas caídas tanto del precio del barril de petróleo (un 38% desde junio pasado) como de las cotizaciones internacionales de referencia de la gasolina y del gasóleo.
Según el informe del organismo regulador sobre el mes de octubre, “es significativo que los márgenes brutos promedio que obtienen los distribuidores de gasolinas aumentaron en octubre con respecto a septiembre, situándose en 17,9 céntimos de litro para la gasolina 95 (+5,1%) y en 17,3 céntimos de litro para el gasóleo A (+3,4%)”.
La CNMC alerta de que los márgenes siguen subiendo (5,1% en la gasolina y 3,4% el diésel) frente a las tímidas bajadas que llegan a las gasolineras, muy inferiores a las que marcan las cotizaciones internacionales
El regulador que preside José María Marín Quemada resalta que las petroleras siguen subiendo los márgenes mes tras mes, pese a que estamos “en un entorno de bajada de precios”.
Sus márgenes brutos de beneficio por cada litro de gasolina 95 vendido ya subió un 5,3% en julio y un 12,9% en el conjunto del verano, un periodo en que los combustibles bajaron mínimamente en las gasolineras pese a que ya los precios del crudo se alejaban hacia abajo desde la cota de los 100 dólares. “Si cae el barril de crudo, se disparan los márgenes de las petroleras y las gasolinas no bajan, sin duda se ensanchan los beneficios de las compañías”, señala un experto.
En octubre, constata la CNMC, al menos el alza de los márgenes se atempera gracias a que las compañías trasladaron a sus estaciones parte de las bajadas de las cotizaciones internacionales. “El precio de venta al público de la 95 en Península y Baleares disminuyó por cuarto mes consecutivo, un 3,4% hasta situarse en 1,371 euros por litro. Mientras que el precio promedio del gasóleo A disminuyó un 3%, respecto a septiembre, situándose en 1,29 euros por litro”, señala el informe.
Pero la CNMC advierte que esas bajadas están lejos de las que registró la cotización internacional de referencia, que cayó un 9,1% en el caso de la 95 y un 6,9% en el diésel. Y todo ello aderezado con que “la depreciación del euro frente al dólar en el mismo periodo fue del 1,8%”, añade el informe.
La gasolina 95 bajó en octubre sólo un 3,4%, pero su precio de referencia internacional cayó un 9,1% mientras el barril de crudo se hundía camino de los 70 dólares
Por su parte, el barril de crudo ha caído en picado durante en los últimos meses, especialmente en octubre y noviembre, y hoy ya cotiza por debajo de los 70 dólares.
Pese a todo ello, censura la CNMC, “España se mantiene como uno de los países con los precios más elevados”, especialmente sin son antes de impuestos, superando a países como Alemania y Francia, entre otros.
“En octubre de 2014, los precios antes de impuestos de la 95 en España fueron superiores a los de las medias europeas en dos céntimos de euro por litro respecto a la eurozona y en 3,4 con respecto a la UE”, señala el informe.
El regulador insiste en que "España se mantiene como uno de los países con los precios más elevados" de toda la Unión Europea
Según las fuentes consultadas, esta situación, en lugar de corregirse, se habría afianzado en el mes de noviembre, mes sobre el que la CNMC aún no ha concluido su informe.
Las dos principales causas que provocan esta situación de altos precios en España son los altos márgenes que se embolsan las petroleras y la casi inexistente competencia en precios entre las gasolineras, según vienen denunciando desde hace años las organizaciones de consumidores y otras instituciones independientes.
Sin embargo, el ministro Soria insiste en que hay competencia entre gasolineras y que la llegada de las estaciones independientes han contribuido a bajar los precios y a “disminuir el poder de las grandes marcas en relación con aquellas estaciones con las que contratan”.
