La lucha contra el coche de combustión que tanto ha dado a la industria española desde mediados del pasado siglo parece tener ya fecha de caducidad. Un paso hacia el coche eléctrico que el Gobierno quiere acelerar aun más sin tener un verdadero plan de desarrollo para que este sea una realidad y cualquier usuario pueda acceder a él y; lo que es más importante, pueda utilizarlo sin restricciones ni limitaciones en cuanto a recarga en todo el territorio nacional, algo que a día de hoy resulta imposible y que al ritmo que avanza no parece que en 2035 estemos completamente preparados.
Y sin embargo, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico considera que España "tiene el trabajo hecho" y pretender adelantar cinco años, al 2035, la prohibición de vender turismos nuevos con motores de combustión. La Cumbre del Clima COP26 que se celebra hasta hoy viernes en Escocia tiene previsto firmar una declaración en la que los firmantes trabajarán para que "todas las ventas de camionetas y automóviles nuevos sean cero emisiones a nivel mundial para 2040, y a más tardar en 2035 en los principales mercados”.
El denominado Acuerdo de Glasgow sobre Emisión Cero de Vehículos está previsto que sea rubricado por más de 100 entidades, entre las que figuran 31 países, aunque los tres mayores mercados mundiales como son Estados Unidos, China y Japón, así como España, Alemania y Francia no se han adherido de momento. Fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico han declarado a Efe que España ya está preparada para dar este paso, que "la ley de cambio climático establece 2040 como el tope para las ventas de coches que no sean de emisiones cero", pero que la norma contempla que "automáticamente se modifique esa fecha y se establezca 2035 si es lo que acuerdan finalmente todas las instituciones europeas".
También han recordado que, en estos momentos, se debate en el seno de la Unión Europea una propuesta de la Comisión Europea para poner fin a partir de 2035 a las ventas de los coches que emitan gases de efecto invernadero. Sin embargo, no todos los fabricantes ven esas fechas como realizables.
Discrepancias entre las marcas
Así, marcas como Volvo, Ford, General Motors, Mercedes-Benz, Jaguar Land Rover y BYD Auto han firmado la Declaración de Glasgow sobre vehículos y vehículos comerciales con cero emisiones en la conferencia COP26 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre el cambio climático. Una declaración, presentada como parte del Día Mundial del Transporte en la COP26, que señala el compromiso de los líderes de la industria y los gobiernos de eliminar gradualmente los vehículos de combustibles fósiles en los principales mercados para 2035 y a nivel mundial para 2040.
Sin embargo, otras marcas como Toyota y Volkswagen, así como Honda, Nissan, BMW, Hyundai y el Grupo Stelllantis (Peugeot, Opel, Citroën, Fiat…), no suscribieron la declaración, lo que resalta los desafíos de cambiar a cero emisiones, según 'Automotive News Europe'.
Por un lado, General Motors declaró que se enorgullece de estar junto a otras empresas, gobiernos y organizaciones para apoyar la declaración a través de la que se compromete a trabajar hacia una transición a vehículos 100% cero emisiones para 2035. Ford también confirmó su participación y comentó que será necesario que todos trabajen juntos para tener éxito confirmando que su gama de turismos será totalmente eléctrica para 2030.
Asimismo, Volvo Cars ya se ha puesto el objetivo de ser totalmente eléctrico para 2030, mientras que Jaguar lo será a partir de 2025. Mercedes-Benz (Daimler), por su parte, declaró que será totalmente eléctrico al final de la década, "cuando las condiciones del mercado lo permitan".
Sin embargo, el consejero delegado de Volkswagen Group, Herbert Diess, explicó que la propuesta de eliminar los vehículos con motor de combustión interna para 2040 no es factible. "La capacidad de las baterías y la construcción de redes de energía renovable en Europa serán un cuello de botella", subrayó Diess durante una conferencia organizada por el periódico alemán 'Handelsblatt'. Hasta ahora, la marca alemana se ha comprometido a producir solo vehículos totalmente eléctricos en Europa a partir de 2035 y a tener una flota sin emisiones de dióxido de carbono (CO2) a nivel mundial para 2050.