La hostelería confía en que marzo sea el mes en el que comiencen los 'brotes verdes' del sector, tras un inicio de 2022 por debajo de sus previsiones debido al impacto de la variante ómicron.
En concreto, los bares y restaurantes cerraron el ejercicio 2021 con la facturación un 70% por debajo del año 2019, el último prepandemia, pese a que las expectativas para la campaña navideña eran positivas. La llegada de la nueva variante, sin embargo, propició que centenares de reservas fueran canceladas para esas fechas, además de que fueron varias las comunidades que endurecieron sus restricciones para estos locales.
No obstante, y manteniendo 2022 como un año definitivo para el "despegue" pese al mal comportamiento de enero, los hosteleros fijan el mes que viene como el primero en el que comenzarán a anotar cifras positivas. "Creemos que a partir de marzo empezará a notarse la mejora, porque venimos de un punto muy bajo. Después este final de año tan malo y este comienzo empezarán a mejorar las cifras respecto a meses anteriores", prevén desde Hostelería de España.
Para la patronal, consultada por Vozpópuli, "habitualmente, entre marzo y abril se empieza a notar mejoría, tanto por la mejora del tiempo como por la Semana Santa". Después de unos últimos meses con los contagios disparados, "la situación está mejor y la gente empieza a confiar; empieza a haber cierta movilidad y recuperación del turismo", detecta la patronal. No obstante, aseguran los empresarios, "el aumento generalizado de los costes está suponiendo un fuerte impacto en el sector y empezará pronto a lastrarlo".
La hostelería vuelve a los ERTE
Con todo, la recuperación de marzo, que "será respecto a los meses precedentes", se producirá tras un periodo en el que los empresarios han vuelto a recurrir a los ERTE para hacer frente a las bajadas de actividad.
La hostelería engrosó así la lista de trabajadores acogidos a estos expedientes durante el mes de enero. Durante el primer mes del año, fueron cerca de 39.000 los empleados hosteleros que estaban en ERTE, lo que supone más de un 30% del total. Se trata de una cifra superior a la anotada en diciembre, cuando eran 37.000, y supone una ligera tendencia en ascenso tras la disminución de los últimos meses.
Enero concluyó con cerca de 1,5 millones de trabajadores del sector afiliados a la Seguridad Social, un 12,9% más que en el mismo mes de 2021. La cifra se sitúa casi un 5% por debajo de enero de 2020, el último enero prepandemia, con 75.490 afiliados menos que entonces.
En lo que respecta a todo el ejercicio 2021, la caída de ventas del sector se sitúa de media en 40.000 millones euros menos en ventas respecto al año 2019, cerca de un 30%. La recuperación ha sido notoria respecto al año 2020, cuando este descenso se situó de media en el 50%, pero es peor de lo previsto por los datos del último mes del año. Los dueños de los bares y restaurantes reconocieron a cierre de año que ha habido "una recuperación importante con respecto a 2019. Es una valoración positiva, pero porque el verano fue bueno y octubre y noviembre también parecían seguir esa senda de recuperación. Pero se cortó de raíz".
