LaLiga prepara ya la subasta de los derechos del fútbol, una puja que generalmente se hace para las próximas tres temporadas. A día de hoy trabaja en un cambio de formato de las adjudicaciones, que se decidirán más pronto que tarde. El organismo que defiende los intereses de los clubes ha comunicado a las empresas interesadas que en unos días se celebrará la subasta, tal y como ha podido saber Vozpópuli. De momento no ha facilitado detalle alguno sobre cuál será el formato en esta ocasión.
Javier Tebas, presidente de LaLiga, pretende incrementar la recaudación por derechos de emisión de los partidos de fútbol, para lo cual anunció hace unos meses un formato de subasta atractivo para otros actores, que ya estudian su entrada en este negocio.
Hablamos de compañías como Amazon Prime Video, Netflix o DAZN. La que más se ha acercado a LaLiga ha sido Amazon. La compañía norteamericana fundada por el hoy multimillonario Jeff Bezos compró los derechos de emisión de primera división en febrero de este año y hasta el final de la temporada 2021/2022 para sus clientes de Reino Unido.
El cambio en el formato de la subasta, que todo apunta tendrá más lotes, supondrá que Telefónica podría perder toda la exclusividad de los partidos. En la actualidad los lotes de partidos que se ofrecen en el concurso separaban los 8 partidos de Primera División en un lote, el 'Partidazo' en otro y el partido en abierto en un tercero.
"Yo siempre soy optimista, pero lo que tengo claro es que no vamos a crecer a dobles dígitos, eso se ha acabado por un periodo de tiempo. Vivimos una época en que la crisis de la covid-19 y la transición entre la IPTV y el mundo de las OTT puede penalizar. Pero soy optimista, igualamos o crecemos", aseguró el pasado mes de junio durante su participación en el foro 'EFE Sport Business Days'.
LaLiga realizará la subasta con más lotes que en otras ocasiones, para facilitar la entrada de actores como Amazon, Netflix o DAZN, lo que incrementará el precio de la puja
Además, el presidente de LaLiga ratificó el cambio de modelo en la subasta del deporte rey. "Sí que va a haber un cambio de estrategia a la hora de la configuración del 'tender'. Va a haber muchos lotes, muy diferentes, y en cuatro 'subtenders' diferentes. Puede haber como ahora, ocho en pago, el partidazo y uno en abierto; pero puede haber siete en una plataforma, tres en otra y tres jornadas aparte, tipo lo que tiene Amazon en Inglaterra. Va a ser diferente".
La temporada 2019/2020 LaLiga ingresó 1.145 millones de euros por estos derechos, en la temporada 2020/2021 esta cifra fue de 1.105 millones de euros. Esta cantidad es inferior por los efectos derivados de la pandemia en el mundo del fútbol, que aún vive con aforos restringidos a los estadios.
LaLiga española ha perdido el calificativo de 'mejor del mundo' en detrimento de la inglesa, que cuenta con mucho músculo financiero. La necesidad de inversión es tan necesaria que Tebas llegó a un acuerdo con el fondo CVC para que invierta 2.700 millones de euros a cambio de un 11% del negocio generado por la competición.
Telefónica, preocupada por la decisión de LaLiga
Desde la compañía presidida por José María Álvarez-Pallete saben temen la llegada de nuevos competidores a la puja porque supondrá un aumento del coste de la subasta. Sucede, además, en un momento en el que las cuentas del operador no van tan bien como le gustaría.
Si Telefónica no posee, como hasta ahora, todo el fútbol en exclusiva, dejará de contar con un elemento diferencial respecto a la propuesta comercial de sus competidores. En un mercado en el que la única disparidad en los servicios ofrecidos es el precio, la oferta de Telefónica tenía sentido: el usuario que quería ver el fútbol en casa tenía que pasar por la caja del operador sí o sí.
Es decir, en el caso de que cualquiera de los competidores anteriores vayan a la puja y se hagan con un lote habrá consecuencias en la cifra de clientes de Telefónica. Dependiendo del paquete que compren la pérdida de clientes del operador será mayor o menor. Esto, obviamente, tendrá un efecto dominó en las cuentas de la compañía de telecomunicaciones, que se verán malogradas.
