La reducción del límite de aportación a los planes de pensiones individuales provocó en 2021 una disminución de casi el 40% de las aportaciones brutas, con unas prestaciones netas de 117 millones negativos, frente a las aportaciones de 1.336 millones de euros registradas en 2020, según datos publicados este martes por Inverco.
A pesar de ello, el sistema individual sigue registrando máximos históricos de patrimonio, animado por el rendimiento de las carteras de los partícipes: a cierre de 2021 alcanzaba los 89.323 millones en 9,455 millones de partícipes, si bien el número estimado de partícipes es de ocho millones.
El patrimonio total se situó a cierre de 2021 en 127.998 millones de euros tras aumentar en 3.463 millones en el último trimestre del año. La rentabilidad de los planes de pensiones fue del 8,5%, la segunda cifra más alta de su serie histórica, solo por detrás del avance registrado en 2019.
La renta variable, la mejor opción
La categoría con más rentabilidad ha sido la de renta variable, con un retorno del 23,42%, seguida de la renta variable mixta, con un 11,91%. A largo plazo, la rentabilidad media anual a 25 años se sitúa en el 3,3% para el total de planes, y en el medio plazo (diez y 15 años), se sitúa en el 4,6% y el 2,7%, respectivamente.
Por sistemas, el individual cerró el año en 89.323 millones de euros, lo que supone un incremento respecto a septiembre del 3,2%, en tanto que el número de cuentas de partícipes se situó en casi 7,5 millones.
El sistema de empleo, por su parte, alcanzó un volumen de activos de 37.792 millones de euros, con un incremento del 1,8% respecto al trimestre anterior, con un número de cuentas de partícipes de 1,92 millones.
El sistema asociado cerró el año con un volumen de activos de 883 millones de euros, lo que supone un incremento del 3,2% con respecto a septiembre de 2021. El número de cuentas de partícipes fue de 51.281.