Mango lleva tres años consecutivos en números rojos. Y la textil catalana quiere volver a la senda del beneficio bajo la receta de menos tiendas, pero más grandes. Desde 2016, la compañía ha cerrado 34 establecimientos, reduciendo su red hasta las 2.183 tiendas, y ha aumentado su superficie de venta hasta los 817.000 metros cuadrados, un 2,3% que hace dos años. Y en 2019 mantendrá este camino.
En sus recientes resultados de 2018, que presentó el pasado jueves, Mango explica que ha seguido reorganizando su parque de tiendas para "adaptarlo a las nuevas necesidades, pero la superficie de venta se ha mantenido muy estable". En cifras absolutas, la compañía finalizó el ejercicio con 4.000 metros cuadrados que en 2017, pero con siete tiendas menos que el año anterior. "De cara a 2019 se estima una evolución similar", informa la textil catalana.
Manteniendo esta tendencia, la compañía ha reducido en dos años sus números rojos a la mitad. En 2016, Mango entraba en pérdidas de 61 millones de euros, una cifra que en 2017 se reducía a 33 millones y que en 2018 se mantenía en los 35 millones. La empresa insiste en la buena salud de su negocio y que, si no fuera por el impacto de factores externos como la depreciación de la lira turca, este año habría retornado a la senda de los números negros.
Sus ventas le sitúan como el segundo grupo español de moda tras Inditex. La textil catalana cerró el ejercicio 2018 con un incremento en las ventas de 40 millones de euros, hasta alcanzar los 2.233 millones de euros. Esta cifra supone un aumento del 1,8% en comparación con los 2.194 millones de euros de 2017.
Respaldo del online
El 20% de los ingresos de Mango llegan por sus ventas a través de Internet. Un nivel que, según explican desde la compañía, no se esperaba que llegase hasta 2020. Ahora, tras la revisión de sus planes, prevé alcanzar el 25% en 2019 y el 30% en 2020. Sólo en este último ejercicio, la cifra de venta online se incrementó en un 31%, hasta alcanzar la cifra de 445 millones de euros.
Mango vende por Internet en 80 de los 110 países en los que está presente. "Tras la apertura de la tienda online en Ucrania, la marca está trabajando para abrir nuevos mercados de acuerdo con su estrategia omnicanal y, de esta forma, poder estar presente en todos aquellos países donde ya dispone de tiendas físicas", explican desde la compañía.
Cambios en la dirección
En noviembre de 2018, el presidente Isak Andic decidió colocar a su, hasta entonces, director financiero como director general. Tras su ascenso, Toni Ruiz ha configurado un nuevo comité de dirección formado por diez directivos, la mitad de los cuales provenían de fuera de la compañía. Este órgano de gobierno, según detalla la compañía, es el encargado del cumplimiento del plan estratégico a través de una profunda transformación digital de la empresa.
“Nuestra misión es acelerar la transformación digital de Mango y por ese motivo durante los dos últimos años hemos invertido más de 75 millones de euros en proyectos dirigidos a la transformación digital de la empresa”, explica Toni Ruiz. La inversión total de la compañía en 2018 ascendió a 57 millones. Un giro que tiene como objetivo, a corto plazo, devolver a la compañía a la senda del beneficio.
