El sector de las energías renovables está de moda en España. La reciente aprobación de la Ley de Cambio Climático en el Congreso de Los Diputados y los 13.200 millones para abordar la descarbonización de la economía que ha prometido este martes Pedro Sánchez hace que los inversores afilen los cuchillos con el negocio 'verde'. Aunque hay algunos 'valientes' que siguen desconfiando de este tendencia.
Esta semana volvía una posición bajista, inversores que apuestan por la caída del valor, en el registro de Iberdrola en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). AQR, el fondo de capital riesgo americano fundado por exdirectivos de Goldman Sachs, ha informado al mercado que tiene una posición 'corta' (como también se denominan los bajistas) del 0,5% en la segunda mayor empresa del Ibex 35.
Una apuesta que tendría un valor de mercado que ronda los 355 millones de euros. Es la tercera vez en la historia de Iberdrola que un 'hedge fund' le ataca de esta manera. La última posición corta a la empresa de Ignacio Sánchez Galán hay que remontarse a marzo de 2020 cuando Bridgewater Associates, el 'fondo buitre' del conocido inversor americano Ray Dalio, registraba 0,49% de la compañía. Y, en 2014, los estadounidenses de Och-Ziff Management tenían en su cartera un 0,03% de Iberdrola esperando a que sus acciones cayeran.
El movimiento de AQR también sorprende porque Iberdrola ha sido una de las empresas que mejor ha sabido esquivar en Bolsa la incertidumbre del coronavirus. Las acciones de la empresa de Ignacio Sánchez Galán se ha revalorizado en el mercado un 30% desde el estallido de la pandemia, Iberdrola ha sido una de las empresas que más ha aplaudido las normativas que ha puesto en marcha el equipo de Teresa Ribera y su plan es invertir en este negocio 75.000 millones de euros hasta 2025. No obstante, su acción ha corregido un 0,68% en lo que va de 2021 y a eso se agarra AQR para triunfar con su apuesta.
Solaria y Audax Renovables
Junto con la entrada de bajistas en Iberdrola, esta semana también ha aumentado su posición este tipo de inversores en dos empresas del sector. Solaria, la fotovoltaica de la familia Díaz-Tejeiro que entró el pasado año en el Ibex 35, ha sufrido esta semana un nuevo incremento de la posición corta del fondo Millennium International hasta un total de 1,13% de su capital. Una participación que tendría un valor de mercado de 30 millones de euros.
También Citadel, el 'hedge fund' donde trabaja Ben Bernanke, ha incrementado su apuesta bajista de Solaria hasta el 0,59% (14 millones de euros). En total, la fotovoltaica registra en la CNMV un grupo de seis inversores que retienen cerca del 6% apostando a que su acción va a caer. Su valor bursátil se ha disparado un 112% desde abril de 2020, pero en lo que llevamos de año los bajistas se han beneficiado de una caída del 22%.
Por último, Audax Renovables ha aumentado la participación bajista en este mes de abril. Precisamente, Citadel ha subido hasta el 2,1% su participación corta de Audax y el fondo Linden Advisor ya cuenta con el 1,3% de la energética, con un valor de mercado de 12 millones de euros, para generar rentabilidad en sus caídas.