El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha dado un paso importante este martes al autorizar un contrato de 21,8 millones de euros, sin incluir IVA, para el fresado de carril en 636 kilómetros de líneas ferroviarias. Esta decisión, gestionada a través de Adif, busca asegurar que el material de vía mantenga estándares de fiabilidad y calidad óptimos. El contrato tendrá una duración de dos años y se centrará en la recuperación del perfil del carril utilizando maquinaria especializada. Este proceso es crucial para proteger el acero del desgaste que provoca el paso continuo de los trenes.
Inversión en infraestructura ferroviaria
El fresado de carril es una técnica que permite preservar la estructura del acero, evitando la pérdida de átomos de carbono que podría comprometer su integridad a largo plazo. El contrato se dividirá en dos lotes: el primero cubrirá 400 kilómetros de líneas de ancho convencional, mientras que el segundo abarcará 236 kilómetros de vías y estaciones de ancho métrico y estándar. Esta iniciativa es parte de un esfuerzo más amplio para garantizar que Adif disponga de los equipos y medios necesarios para enfrentar la complejidad técnica de estos trabajos.
El mantenimiento de 636 kilómetros de vías y aparatos de vía es una tarea fundamental para el correcto funcionamiento de la red ferroviaria. El contrato se complementa con otros vigentes que Adif tiene en marcha, destinados a la conservación de otras partes de la infraestructura ferroviaria, como túneles, puentes y sistemas de señalización. Estos contratos aseguran que la red convencional se mantenga en condiciones óptimas, permitiendo un transporte seguro y eficiente.
La conservación de las vías y aparatos de vía es esencial para el desarrollo de un sistema de transporte sostenible. El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible está comprometido con el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), especialmente el número 9, que promueve infraestructuras fiables y de calidad. Además, esta actuación también contribuye a los ODS 7 y 8, que se centran en la sostenibilidad y el crecimiento económico, respectivamente.
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