El Estudio Lamela, célebre por obras como las revolucionarias y a la postre icónicas Torres Colón de Madrid, la Terminal 4 del Aeropuerto de Barajas o la reforma del Santiago Bernabéu en 2002, acaba de irrumpir en el incipiente mercado de las viviendas de construcción industrializada.
Desde el despacho de arquitectura apuntan a Vozpópuli que tienen ya una cartera de treinta viviendas prefabricadas en España, todas ellas de la mano de la mayor promotora por capitalización bursátil en estos momentos a nivel nacional, Aedas Homes.
El proyecto de Aedas con el Estudio Lamela busca reducir los tiempos de construcción hasta en un 50%, y se espera que todas las viviendas industrializadas firmadas por Lamela (dos promociones, de 16 y 14 casas unifamiliares) estén finalizadas a lo largo de 2022.
Viviendas de lujo
Las viviendas se están desarrollando ahora en fábricas para luego ser emplazadas sobre puntos de Madrid y Palma de Mallorca, como Boadilla del Monte y Llucmajor, por precios que parten de los 760.000 euros (290 metros cuadrados) y 475.000 euros (200 metros cuadrados) respectivamente.
Las casas tendrían características propias del segmento medio-alto: entre cuatro y cinco habitaciones, patios al estilo inglés, plazas de aparcamiento para coches eléctricos y piscina privada. Sumarían en total un valor de 20 millones de euros.
El caso del Estudio Lamela se suma al de otros célebres para el comprador de alta gama, como A-Cero, el despacho del conocido como 'arquitecto de los famosos', Joaquín Torres, diseñador de cabecera de la urbanización más exclusiva de Madrid, La Finca.
Su filial A-Cero Tech aspira a multiplicar por siete sus ingresos en los próximos dos años, hasta los 30 millones, gracias a la construcción de viviendas prefabricadas de lujo.
Proyectos del sector
Aedas Homes, la mayor promotora residencial en España ahora mismo, trabaja ya para que una de cada cuatro de sus nuevas viviendas sea total o parcialmente prefabricada en 2023, en vistas a reducir los tiempos de construcción y favorecer la captación de fondos hacia la sostenibilidad energética.
La compañía que dirige David Martínez ya ha entregado un centenar de viviendas completamente prefabricadas y un total de 3.000 de las que tiene en marcha han contado o cuentan con algún grado de industrialización en el proceso. Ambas cifras le han facilitado cumplir con los objetivos de su plan de negocio pese al impacto del coronavirus.
Las proyecciones de Aedas entroncan con las de la constructora madrileña Avintia, que ya montó el primer edificio residencial prefabricado en altura de la historia de España -uno de alquiler asequible que se ha ocupado ya al 100%-, y las de la edificadora navarra ACR, otra de las pioneras del mercado de la vivienda industrializada.
ACR entiende que la industrialización es una vía para atraer profesionales al sector y resolver el creciente problema de la falta de mano de obra, reduciendo así costes de producción. Estima que hasta un 20% de todas las nuevas viviendas sea de construcción industrializada en el próximo lustro. Al igual que Avintia, proyecta de cara a 2025 que una de cada tres nuevas viviendas para el alquiler en España sea prefabricada o de construcción industrial.
