El sector bancario es un hervidero en general en toda Europa, pero con mención especial a las compañías medianas españolas, muy castigadas en el pasado reciente pero que en este inicio de 2013 están suscitando una enorme demanda inversora, que raya en la voracidad. Son muchas las voces que apuntan a España como uno de los mercados en los que hay que tomar posiciones y algunos lo están haciendo a marchas forzadas, sin dejar atrás a los emisores más penalizados. De esta manera, Banco Popular colocó ayer sin el menor problema 750 millones de euros en deuda senior, respaldada totalmente por ellos, con casi un 75% de inversores internacionales comprando. Algo impensable hace pocos días. Pero hay más.
Los cds están bajando claramente, como puede verse en los gráficos adjuntos de Bankinter, Popular y Sabadell, en los que se puede comprobar el estrachamiento del seguro de default y el rebote de la acción. En Bolsa, Bankinter cerró con un 30% anual al alza y Popular con un 20%. “Llevamos unos días que nos quitan literalmente de las manos todo papel corporativo bancario que tengamos, ya sean cédulas o bonos”, comenta José Carlos Díez, economista jefe de Intermoney.
Esto es fruto, principalmente, de la moratoria otorgada por el Comité de Supervisión Bancaria de Basilea III, que permite relajar las exigencias de liquidez de la banca, pero también del proceso de ajustes realizados en España.
“Se dan factores curiosos, como que algunas emisiones de, por ejemplo, CajaSol, ahora el titular es CaixaBank”, por lo que la solvencia del garante mejora sensiblemente, mientras la rentabilidad sigue siendo la misma, es decir, más alta de la que correspondería, comenta el experto.
Así, “hay mucha demanda por ese tipo de activos, otra cosa es que el titular quiera venderlas. Pero en los últimos tiempos están entrando en el mercado aseguradoras y pensiones europeas, o sea, cliente estable”, señala Díez. De forma parecida se manifiesta David Cano, de Afi, que indica que “el pasado año el castigo fue enorme. Hubo venta de activos españoles por parte de no residentes en más de 400.000 millones de euros”. Un 40% del PIB.
¿Qué está ocurriendo ahora? Que hace unos 10 meses “todos los gestores proclamaban en público que no estaban en España y ahora, de repente, nadie puede presumir de no estar en nuestro país”, añade. Después de un año 2012 de duros ajustes, muchos son los inversores que se plantean que el castigo ha sido excesivo y pueden estar perdiéndose algo bueno, aunque Díez hace una llamada a la prudencia: "tampoco es razonable una euforia desmedida como la que empieza a verse". Los mercados reaccionan en exceso.
No sólo con los pequeños. En el EuroStoxx, los mejores valores del año son Deutsche Bank, Societe Generale, Unicredito, Intesa, BBVA e ING, todos con más de un 5% al alza, aunque lejos de locuras como las de Bankinter o Popular. Santander, por su lado, tiene su cds en mínimos de los últimos 11 meses. La banca sube ante la aparente flexibilidad de exigencias y la española más que las demás, ya que ha sido más castigada recientemente.
Repunte de los periféricos y ayudas del BCE
Pero los avances no son exclusivamente sectoriales, también están levantando cabeza las economías sobre las que ha existido la sombra del rescate. Los países periféricos también comienzan a ser mirados con otros ojos por parte de los inversores. El bono portugués a 10 años está en el 6,5% y el irlandés a 9 en el 4,42%, al mismo nivel que Italia.
Ayer había fuertes rumores de que el BCE anunciará mañana que tanto Irlanda como Portugal serán incluidos en el programa de ayudas OMT, lo que a su vez sería un espaldarazo para España.
Desde uno de los bancos medianos en cuestión señalan que “seguramente, este ejercicio los comparables de resultados serán muy buenos, sobre todo si se suaviza las exigencias de capitalización que nos exige dotar y volver a dotar. Si demostramos también capacidad de ganar dinero, después de tantos ajustes, la acción se disparará”.