Adelgazar puede ser también divertido si hacemos ejercicio (fundamental combinarlo con una alimentación saludable) y mientras lo hacemos ahora también podemos cuidar nuestra mente y tratar de reducir el estrés del día a día. Una de las tendencias fitness que se ha puesto de moda en los últimos tiempos es el Yoga HIIT, que combina dos modalidades de ejercicio aparentemente contradictorias: el yoga, que se centra en la relajación, la flexibilidad y el equilibrio, y el HIIT, que se enfoca en ejercicios de alta intensidad para aumentar la resistencia cardiovascular y muscular.
Esta combinación es ideal para ofrecer los beneficios de ambas prácticas en una sola sesión de entrenamiento. También conocida como YIIT, esta disciplina resulta perfecta para aquellos que buscan adelgazar y mantener nuestra mente activa y alejada del estrés o la ansiedad que pueden provocar las tareas laborales o las responsabilidades de muy diversa índole. Como siempre decimos, para perder peso es bueno ponerse en manos de profesionales, igual que a la hora de comenzar algún deporte que nunca antes hayamos practicado.
Para obtener beneficios a largo plazo, intenta incorporar el Yoga HIIT en tu rutina de ejercicios de manera regular y combinarlo con otros tipos de entrenamiento de fuerza y cardiovasculares. Puedes comenzar con una o dos sesiones por semana y aumentar gradualmente la frecuencia a medida que te sientas más cómodo.
Beneficios del Yoga HIIT
La unión de estas dos disciplinas es una combinación ideal para fortalecer nuestros músculos y mejorar además nuestra fuerza física y nuestra resistencia, pero además tiene otros grandes beneficios (no solo adelgazar) para nuestro organismo:
-Mejora de la salud cardiovascular. El componente de alta intensidad del Yoga HIIT puede mejorar la salud del corazón y la circulación sanguínea, lo que a su vez puede reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Un buena alimentación equilibrada es clave también para ayudar en esta tarea.
Mejora de la flexibilidad y equilibrio. Con las asanas lograremos mejorar la flexibilidad y el equilibrio, lo que es beneficioso para la prevención de lesiones y la movilidad también cuando se llega a una determinada edad. La prevención nunca está de más.
-Adiós al estrés. El yoga tradicional se centra en la relajación y la respiración, lo que puede ayudar a reducir el estrés y mejorar la salud mental. Dedicar unos minutos al día a cambiar el chip y dejar los problemas fuera de la sala de entrenamiento te hará sentir con más energía para afrontar lo que venga. Además, el Yoga HIIT favorece la concentración, ya que para llevar a cabo cada entrenamiento deberás estar plenamente concentrado en esa tarea para evitar así también lesiones indeseadas.
-Adelgazar. Los ejercicios de alta intensidad involucrados en el HIIT pueden ayudar a quemar calorías de manera efectiva, lo que puede ser beneficioso para adelgazar y el control del peso.
-Fortalecimiento de la musculatura central. Muchas de las posturas de yoga requieren el uso de los músculos del núcleo (parte central de nuestro cuerpo, el core), lo que puede llevar a fortalecer toda esa zona y evitar así posibles lesiones lumbares o dolores de espalda.
Adelgazar sin estrés
En una sesión de yoga HIIT se alternan ráfagas cortas de ejercicios de alta intensidad típicos de una clase de HIIT (suelen ser sesiones de una media hora a alta intensidad) con posturas de yoga y ejercicios de respiración que complementan la sesión. Esta variación entre ejercicios vigorosos y momentos de relajación y estiramiento puede mejorar la fuerza, la resistencia, la flexibilidad y la concentración, al tiempo que quema calorías, nos ayuda a adelgazar y mejora la salud cardiovascular.
Un ejemplo de una sesión de yoga HIIT podría incluir una serie de posturas de yoga seguidas de ejercicios de alta intensidad como los burpees y luego volver a hacer algunas asanas para llevar a cabo la recuperación unidas a ejercicios de respiración. La idea es que este enfoque mixto brinde una experiencia de ejercicio completa, que trabaje tanto el cuerpo como la mente.
Es importante tener en cuenta que este tipo de entrenamiento puede ser todo un desafío si nunca antes has hecho ejercicio físico y no es adecuado para todas las personas, por lo que es recomendable consultar a un profesional de la salud o a entrenador personal antes de comenzar cualquier programa de entrenamiento, especialmente si tienes alguna condición médica o lesiones preexistentes.
Claves para iniciarte en la práctica
Como hemos afirmado, lo primero que deberías hacer si quieres probar el Yoga HIIT es consultar a un experto profesional que vea si es lo más adecuado para ti y tu forma física. Es clave contar con un instructor cualificado que tenga certificación y la experiencia suficiente para poder darte las claves a la hora de empezar la práctica y que adapte las sesiones a tus necesidades y condición física.
Antes de comenzar la práctica, es bueno familiarizarse con los principios fundamentales del yoga y con las bases del HIIT y entender así cuáles son los propósitos de cada una de ellas.
Aprende las posturas de yoga básicas. Antes de participar en una clase de yoga HIIT, es útil conocer algunas de las asanas básicas. Esto te ayudará a sentirte más cómodo durante la sesión. Busca además clases de Yoga HIIT que estén diseñadas para principiantes o que ofrezcan modificaciones para adaptarse a diferentes niveles, ya que así podrás ir mejorando de manera gradual y segura.
Es importante escuchar a tu cuerpo. Si durante una clase notas que no puedes más, párate, respira y si puedes inténtalo de nuevo. No fuerces más de tus posibilidades. No hay prisa y es mejor ir poco a poco que generarte una lesión que te haga parar en seco.
La respiración es un componente importante tanto en el yoga como en el HIIT. Aprende a coordinar tu respiración con tus movimientos y asegúrate de respirar adecuadamente para mantener la energía y la concentración.
Así es una clase
Una sesión de Yoga HIIT es una clase de yoga normal de una hora aproximadamente en la que se lleva a cabo un periodo de calentamiento que va seguido de las asanas, la parte de relajación y atención en la respiración. La diferencia es que en estas clases se introducen unos 12 a 15 minutos de ejercicios de alta intensidad.