Algo huele a podrido en la banca cuando la biblia de las finanzas retrata a los banqueros como gangsters. Con el titular de "Banksters" la edición británica del semanario The Economist hace precisamente eso esta semana. Pese a que la edición global del semanario lleva a portada el hallazgo científico del Bosón de Higgs, la edición para el Reino Unido dibuja a los directivos del sector financiero como los protagonistas de la película de Tarantino Reservoir Dogs: criminales con corbatas y sin escrúpulos.
La portada para el público internacional (a la izquierda) es la que llegará a los quioscos españoles. Sin embargo, la británica (a la derecha) es la que se leerá en los despachos de los bancos.
The Economist, el paladín del liberalismo, completa su portada con un mensaje a los banqueros. En un duro editorial, asegura que la industria financiera ha llegado a su "momento del tabaco": "la banca vive en una cultura de falta de honestidad que acaba de abrir el escenario a más jucios y más regulación".
El semanario concluye recordándoles la frase de un insigne hombre de las finanzas, J.P. Morgan: "Los banqueros deben comportarse en todo momento de forma que se justifique la confianza de sus clientes en ellos”.