El año 2015 ha terminado para los gaditanos marcado por la llegada hace seis meses a la alcaldía de la ciudad de José María González, alias Kichi. El pasado 29 de diciembre era el momento propicio para hacer balance de los primeros meses de gobierno, ante los concejales del consistorio y los medios de comunicación. El primer edil de Por Cádiz Si Se Puede se afanó en halagar sus primeras decisiones al frente de la gestión municipal.
Tenía una oportunidad de oro para exaltar las líneas maestras de su mandato. Y, como no podía ser de otra manera, Kichi comenzó a enumerar las medidas que, a su juicio, están situando a Cádiz "en el eje a la altura de Madrid, Barcelona, Coruña o Santiago", ciudades gobernadas por la formación morada y sus aliados territoriales, con Ada Colau y Manuela Carmena a la cabeza. Así, con el lema del 'cambio' por bandera, es como Kichi resumía el 2015 en un desayuno ante varios miembros de su equipo, algunos concejales del PP, del PSOE y una concejala de Ciudadanos.
José María González definía su todavía escueta etapa de gobierno como un periodo "bastante intenso a nivel político, profesional y personal", a la cabeza de un consistorio del que se siente "muy honrado y orgulloso". Una etapa a la que dio comienzo descolgando el cuadro del rey de su despacho para colocar el retrato de líder anarquista y exalcalde de Cádiz, Fermín Salvochea, del que se declara fiel admirador. Su reto es parecerse a él.
"Estamos repensando el modelo de movilidad y sostenibilidad", "repensando el modelo cultural" y repensando los servicios sociales", aseguró
En ese sentido, Kichi no quiso dejar de enfatizar durante el desayuno las medidas que ha ido tomando a lo largo de estos seis primeros meses de mandato: un protocolo antideshaucios, un plan de emergencia social, medidas para paliar el paro o para solucionar el problema de los sintecho. Kichi también hablo de futuribles, a imagen y semejanza de sus correligionarias de Madrid y Barcelona: "Estamos repensando el modelo de movilidad y sostenibilidad", "repensando el modelo cultural" y repensando los servicios sociales", aseguró.
José María González pidió en un discurso, -muy en la línea del espíritu 'happy' de la alcaldesa de Madrid-, que la "felicidad" y la "prosperidad" inunde la ciudad de Cádiz. Sin embargo, ese mismo día 31 de diciembre terminaba el plazo para que el consistorio gaditano presentase ante el Ministerio de Hacienda el presupuesto de 2016. Algo que Kichi no ha hecho, a la espera de conocer el resultado de una auditoría interna de las cuentas municipales, que acumulan una deuda de 275 millones de euros.
Sí que deslizó, sin embargo, su intención de presentar un nuevo presupuesto antes de marzo, ya que Kichi ha gobernado con unas cuentas prorrogadas de 2014 y elaboradas por la anterior corporación, liderada por Teófila Martínez (Partido Popular). Sin embargo, la mala relación con los bancos dificulta aún más la situación. Habrá que esperar, por tanto, a que el nuevo año eche a andar para conocer el futuro que le espera a esta 'ciudad del cambio'.