El Instituto Municipal de Mercados de Barcelona lleva adelante desde 2021 el proyecto Comercio Verde. Esta iniciativa busca incrementar la visibilidad de productos locales y certificados ecológicos en los mercados municipales de la ciudad. Con 481 puestos ya adheridos, el programa abarca fruterías, pescaderías, carnicerías, establecimientos de legumbres y herbolarios. Desde el 17 de febrero hasta el 19 de marzo, se realizará una campaña para destacar la etiqueta Comercio Verde. Durante este periodo, se sortearán estancias rurales y visitas guiadas a explotaciones locales, lo que permitirá a los ciudadanos conocer más sobre los productos de calidad que se ofrecen en sus mercados.
Promoción de productos locales y sostenibles
La campaña de Comercio Verde no solo busca promocionar productos locales, sino también premiar a los consumidores. Aquellos interesados en participar en los sorteos deberán rellenar un boleto y depositarlo en los buzones habilitados en cada mercado. Esta estrategia de visibilidad no solo busca atraer a más consumidores, sino también generar un cambio en los hábitos de compra hacia opciones más sostenibles. La campaña, al ofrecer experiencias rurales, conecta a los ciudadanos con el origen de los productos, fortaleciendo así la relación entre consumidores y productores locales. El impacto del proyecto Comercio Verde va más allá de los sorteos y las campañas.
Desde su inicio, ha facilitado que la ciudadanía tenga un acceso más directo a alimentos locales y ecológicos. Esto incluye productos de pequeños productores, payeses y lonjas. La iniciativa no solo promueve una alimentación más saludable, sino que también contribuye a reducir la huella de carbono. Al optar por productos de proximidad, se minimizan los desplazamientos y, por tanto, las emisiones contaminantes, apoyando así la lucha contra la emergencia climática.
¿Cómo contribuye Comercio Verde a la sostenibilidad?
El proyecto Comercio Verde también juega un papel crucial en la viabilidad de la agricultura y la ganadería locales y sostenibles. Al dar visibilidad a estos productos, se fomenta su consumo, lo que a su vez garantiza que los productores locales puedan continuar con sus actividades de manera sostenible.
Este apoyo es esencial en un contexto donde la emergencia climática y la sostenibilidad son temas prioritarios. Los mercados municipales de Barcelona se convierten así en un punto de encuentro donde los consumidores pueden encontrar productos de calidad que respetan el medio ambiente. Los 481 puestos adheridos al programa Comercio Verde reflejan la diversidad de productos disponibles en los mercados municipales de Barcelona. Las fruterías, pescaderías, carnicerías, establecimientos de legumbres y herbolarios ofrecen una amplia gama de opciones a los consumidores que buscan productos de proximidad y calidad. Esta diversidad no solo enriquece la oferta de los mercados, sino que también asegura que los consumidores tengan acceso a una variedad de alimentos que cumplen con estándares ecológicos y de sostenibilidad.
La campaña de Comercio Verde, al incluir sorteos de estancias rurales y visitas guiadas, ofrece una oportunidad única para que los ciudadanos se conecten con el entorno rural y los procesos de producción. Estas experiencias no solo son un incentivo para los consumidores, sino que también educan sobre la importancia de elegir productos locales y sostenibles. Al visitar explotaciones locales y participar en catas de productos, los consumidores pueden apreciar de primera mano la calidad y el esfuerzo detrás de cada producto, fortaleciendo así el vínculo entre el campo y la ciudad.
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