El comité intercentros de Tragsa ha manifestado en un comunicado firmado por UGT, CCOO y CGT que no está dispuesto a participar en las "artimañas" de Ana Botella, quien anunció que encargará a esta empresa pública los servicios mínimos de la huelga de limpieza.
En un comunicado emitido este miércoles, los sindicatos rechazan "rotundamente" la intención de la alcaldesa de Madrid y manifiestan su apoyo "total" a las reinvicidaciones de los barrenderos y jardineros de la capital, en huelga desde hace más de una semana.
El comité de Tragsa ha mostrado su rechazo al considerar que no se cumplen los requisitos marcados por la ley en este tipo de situaciones, pues sería necesario que se declarara una situación de emergencia sanitaria. Así, añade que "en este caso no se cumple, según reconoce la propia alcaldesa, pues para que fuese declarada suelen transcurrir unas tres semanas, como ha sucedido en otras ocasiones".
"Entendemos la situación de los compañeros de limpieza de Madrid y reiteramos que no consentiremos que se nos utilice para reventar la huelga", reza el comunicado.
El texto recuerda también que los empleados de Tragsa están inmersos en un expediente de despido colectivo, que afectaría al 23% de la plantilla fija de esta empresa pública. Sostiene además que el personal de Tragsa no va a poder prestar este servicio, ya que la mayoría de los trabajadores que pueden hacer esta tareas va a ser despedido.
