La Asociación Plataforma de Apoyo a las Víctimas del Terrorismo (APAVT) ha presentado ante el Juzgado Central Decano de Instrucción de la Audiencia Nacional un escrito pidiendo la prohibición de la marcha de 352 kilómetros, desde Lesaka hasta Berriozar, que ha convocado SARE para pedir "la vuelta a casa" de los presos de ETA.
La marcha está prevista entre el 29 de septiembre y el 2 de octubre, apunta la asociación en un comunicado en el que reconoce que su petición "no llegará buen puerto", ya que el Código Penal "persigue hechos ya cometidos, no de manera preventiva".
De hecho, añade, las únicas veces que han conseguido que este tipo de convocatorias se prohíban, ha sido en base al artículo 13 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, porque "se pudo demostrar que los participantes o convocantes estaban siendo investigados en algún procedimiento por terrorismo o enaltecimiento del terrorismo".
Pese a ello, aseguran sentirse en la obligación solicitar la prohibición de este tipo de hechos porque, en su opinión, "ni los tribunales ni los delegados de gobierno defienden la dignidad y el honor de las víctimas del terrorismo" y porque las víctimas del terrorismo "no tienen que soportar que las familias de los asesinos digan que hay que cerrar heridas y mirar al futuro".
Sin reconocer el daño causado
"Eso a lo que ellos llaman heridas son nuestros muertos. Son miles de familias rotas en España", asevera al respecto, tras lo que subraya que ellos pretenden "'mirar al futuro' sin colaborar con la Justicia, sin reconocer el daño causado y sin admitir que aquí hay un único relato verdadero: unas víctimas que han puesto las nucas y unos asesinos que han puesto las pistolas".
Augura que en la marcha se "mostrará como víctimas a los terroristas por una supuesta legislación de excepción, y se ensalzará a quienes han sido condenados por pertenecer o colaborar con ETA, o por la realización de acciones terroristas que han causado un gran número de fallecidos y heridos a lo largo del sangriento historial criminal de ETA, lo que constituye una actuación de enaltecimiento y justificación pública del terrorismo, con el menosprecio y humillación a las víctimas y sus familiares"
"Nadie podría imaginar un homenaje en las calles de París a los asesinos de Bataclan, o un homenaje en las calles de Nueva York a los terroristas del 11S", subraya la asociación que pide que "se dirijan oficios a Guardia Civil, Policía Nacional y Ertzaintza para que emitan informes sobre los convocantes formales por si realmente, detrás de los mismos, se encontrase alguna organización ilegalizada".