El Gobierno ha concedido el asilo a Manar Almustafa, la inmigrante siria que está en Melilla desde hace dos meses con quemaduras en el 90% del cuerpo, que será trasladada a la península en las próximas horas o días para ser atendida de sus heridas. Fuentes del Ministerio del Interior han informado este jueves a Efe de la concesión de asilo a la mujer de 30 años, aunque han precisado que su traslado a la península está pendiente de pequeños detalles burocráticos, a punto de resolverse.
Manar Almustafa llegó a la ciudad el pasado noviembre pero, a diferencia de otros inmigrantes que entran de manera irregular, no ingresó en el Centro de Estancia Temporal (CETI), sino que decidió por su cuenta residir en un piso de alquiler junto a otros trece miembros de su familia, según han afirmado a Efe fuentes de la Delegación del Gobierno en Melilla.
La joven, que escapó de su país con quemaduras en el 90% del cuerpo después de un bombardeo, pidió asilo político al pisar suelo español por el conflicto bélico sirio, pero la ley española obliga a las personas que solicitan este trámite a que permanezcan en la ciudad autónoma, a diferencia de lo que sucede en el resto de España, donde los solicitantes tienen libertad de movimiento en todo el país.
Manar, que perdió a su hija y a parte de su familia después de que una bomba cayera en su domicilio de Homs, huyó de la guerra junto a otros parientes por diferentes países, como Líbano, Egipto o Argelia hasta llegar a Melilla. Allí creyó haber conseguido por fin una solución al calvario que vivió durante más de un año, pero se topó con un largo proceso burocrático que le impide salir de la ciudad hacia la península para poder ser atendida de sus graves heridas.
Manar Almustafa necesita salir urgentemente, ya que el hospital de la ciudad carece de una unidad de quemados que pueda atender las graves y dolorosas heridas que sufre, pero no podía hacerlo al ser solicitante de asilo.
Sin embargo, fuentes de la Delegación del Gobierno en Melilla han explicado a Efe que la mujer no requiere una operación urgente, sino que precisa una cirugía reparadora progresiva que exigiría un periodo largo de intervenciones. En el centro hospitalario, a donde fue llevada por la Guardia Civil poco después de su llegada, determinaron que sus heridas tienen una "antigüedad" de más de siete meses y ya fue intervenida de las mismas en seis ocasiones, en concreto en El Cairo.
Puso como condición que se dé asilo a su familia
La joven siria, que inició los trámites para la solicitud de asilo hace unas dos semanas, ha puesto "como condición" para salir de Melilla que también sea tramitada la solicitud de asilo de "todos los integrantes de su unidad familiar", si bien Interior no ha revelado ningún detalle sobre esta petición expresa de Manar.
La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, ha pedido a la Secretaría General de Inmigración que traslade lo antes posible a la península a esta mujer y a su familia, que ha solicitado una orden de protección internacional que ha sido admitida a trámite.
La llegada de sirios a Melilla comenzó a producirse de manera significativa a finales de julio, con un goteo constante que los coloca como uno de los colectivos más numerosos. A diferencia de los subsaharianos, no entran por la valla o en patera, sino que lo hacen a través de los puestos fronterizos, con un pasaporte marroquí, por el que en muchos casos llegan a pagar una media de 3.000 euros (4.100 dólares).