La fiscal al frente del caso Neurona ha pedido a la Audiencia Provincial de Madrid que no reabra la investigación por el Proyecto Impulsa. Se trata de una de las líneas que integra este procedimiento y que el magistrado Juan José Escalonilla archivó al no constatar que Podemos cometiera delito con las donaciones a este fondo. El Ministerio Público ha vuelto a posicionarse en contra de investigar estos hechos al entender que no se ha podido probar un presunto desvío de fondos, como así lo sostienen algunas de las acusaciones que litigan en esta causa.
Con este pronunciamiento, la Fiscalía reafirma su criterio de que únicamente debe indagarse el contrato de Unidas Podemos con la mexicana Neurona para las elecciones generales de noviembre de 2019 (y ello pese a que recientemente ha insistido también en que no ve delito con el pago). En relación al Proyecto Impulsa explica que "no cabe en ningún modo reabrir la investigación" por cuanto no existe indicio alguno de desvío de fondos mediante las salidas de partidas que se hicieron a través de la fundación del partido (Instituto 25 M).
Así lo recoge en un escrito remitido a la Audiencia Provincial de Madrid y al que ha tenido acceso Vozpópuli, en el que rebate la petición de Celia Cánovas. La exsenadora de Podemos, que litiga como acusación particular, denunció que entre junio de 2016 y febrero de 2017 aportó 5.000 euros al Proyecto Impulsa creado para destinar fondos del partido a entidades sin ánimo de lucro. Según dijo, nunca se supo si realmente eso fue así ya que no quedó reflejado en los presupuestos de esos ejercicios.
Podemos remitió documentación acreditativa del destino de fondos. No existe pues indicio alguno de apropiación o desviación de los mismos
La fiscal responde que el hecho de que no aparezca en las partidas de 2016 no determina por sí la existencia de indicio. "La lógica impone que los presupuestos sean anteriores al ejercicio (...). Podemos remitió documentación acreditativa del destino de los fondos. Consta que muchas donaciones se hicieron a través de la fundación, lo que determina que era imposible que se recogiera directamente en los presupuestos. Por otro lado, el partido aporta certificados de donaciones de diferentes entidades beneficiarias del proyecto en 2016, así como el acta del destino de las cantidades del Proyecto Impulsa", explica la fiscal.
Pendientes de la Audiencia
Aunque la Fiscalía y el juez discrepan en algunas líneas de investigación de esta causa, en lo que respecta al Proyecto Impulsa comparten la misma tesis. Tanto es así, que el titular del Juzgado de Instrucción número 42 de Madrid archivó en octubre del año pasado esta parte concreta de la causa. En su auto razonó que Podemos había acreditado la existencia de este proyecto y el reparto de categorías. El partido -que está imputado como persona jurídica- demostró que existieron iniciativas tales como 'Impulsa tu país', 'Impulsa tu retorno' y 'Podemos impulsa' dotada esta última con 100.000 euros.
"Queda por lo tanto suficientemente acreditado el destino dado a través del Proyecto Impulsa, en su edición segunda, gestionado por la Fundación Instituto 25 de Mayo para la Democracia, a las donaciones efectuadas por los cargos públicos a dicho proyecto durante el año 2016", expuso entonces el magistrado. Las acusaciones, no obstante, mantienen en que no hubo suficiente transparencia en relación a estos fondos gestionados desde la fundación que dirige Juan Carlos Monedero (también imputado en el caso Neurona).
Esta es una de las supuestas irregularidades que se recogieron en la denuncia inicial. Tal y como explicó la abogada purgada de Podemos Mónica Carmona la investigación sobre las donaciones a la Escuela Popular Paulo Freire (investigación que también se archivó) se iniciaron a raíz de una denuncia interna acerca de que se había donado una cantidad elevada de dinero para actos de formación a través de la fundación que dirige Monedero. Según plasmó, esto se hizo "sin que existiera la debida transparencia sobre el destino real de dichos fondos", lo que abonaba la sospecha de se utilizaran como tapadera.
El foco, en Neurona
No obstante, el magistrado también terminó archivando esta parte de la denuncia. Así pues, de nuevo la Audiencia Provincial de Madrid tiene la última palabra en relación a las pesquisas por el Proyecto Impulsa que ya se zanjaron provisionalmente en octubre. Las discrepancias entre el magistrado instructor y las acusaciones (entre las que se encuentran Vox y Pro Lege) están provocando que sea la Audiencia de Madrid la que termine sentenciando el futuro procesal de la causa. Esta misma semana, el ente le daba la razón al magistrado en lo que respecta a la Caja de Solidaridad.
Esta parte de las diligencias del caso Neurona también terminan en archivo al constatar la Audiencia de Madrid que no hubo desvío de fondos con la conocida como caja 'B' de Podemos. En este caso se denunciaron irregularidades en relación con una orden de pago de 50.000 euros a #404 Comunicación Popular, asociación ligada al entorno del dirigente de Podemos Rafa Mayoral. Los denunciantes aseguraron que estaba integrada por altos cargos del partido y que se estaba impulsando una especie de desvío de fondos de manera encubierta.
El magistrado respondió que, efectivamente, era cierto que la asociación estaba intrínsecamente ligada a Podemos, pero constató que los servicios se realizaron, por lo que terminó sentenciando que no era delito. La Audiencia se pronunció de un modo similar. Tanto es así que dijo que esta materia debería resolverse como cuestión interna del partido político (en función de lo recogido en sus estatutos) y no a través del derecho penal. Así pues, ratificó la decisión de Escalonilla que había dado carpetazo a este asunto hasta en dos ocasiones.
De este modo el foco se sigue centrando en la contratación de Neurona para las elecciones de Unidas Podemos. Recientemente la Fiscalía ha descartado la comisión de delito al constatar que se pagó a esta consultora con fondos de la formación y no electorales. Sin embargo el instructor no tiene tan clara esta tesis y sigue ahondando en aras a esclarecer si este contrato fue simulado (hecho que Podemos niega). A ello hay que añadir que la Audiencia, tal y como avanzó este diario, ha corregido el criterio del instructor y le obliga a citar a dos testigos clave, ambos trabajadores de Neurona México, que pueden arrojar luz sobre la realización de los trabajos contratados.